Pedro, como de costumbre, alrededor de las tres de la tarde iba al templo a orar. Era la hora del sacrificio de la tarde, y los que podían, iban al templo, los que no podían, generalmente por la distancia, se volvían hacia el templo y oraban a DIOS, ya sea a las 9 de la mañana,o a las 3 de la tarde . Todos los días lo hacían. Y aquel día, en la entrada del templo, apareció un hombre cojo, que no conseguía trabajar, por lo tanto, vivía de limosnas.
Encontrando Pedro y Juan, pidió algo para su supervivencia. Lo que él pidió fue poca cosa, una limosna solamente. Y los apóstoles estaban sin dinero, afortunadamente. Lo que el pobre necesitaba, a sus criterios los discípulos no tenían, y lo que aquel hombre no pedía, ellos tenían, era la curación de su situación. Pedro, que habló con él, no le dió dinero, pero lo curó para que pudiera trabajar y conseguir su sustento con dignidad. ¿Cuándo ese hombre soñaría con ser una persona normal? Él no ambicionaba tanto, se conformaba con limosnas, para vivir precariamente.
Gracias hnos. Por su estuduios y guiarnos en la verdad siempre. DIOS los bendiga siempre amen.