Los álamos temblones son hermosos árboles que alcanzan los 15-30 metros de altura. Prosperan en climas fríos con veranos frescos. Su madera se utiliza para fabricar muebles y cerillas y papel. Los ciervos y otros animales suelen alimentarse de los álamos jóvenes durante los duros inviernos, ya que su corteza contiene muchos nutrientes. Los álamos necesitan mucho sol y crecen todo el tiempo, incluso en invierno, lo que los convierte en importantes fuentes de alimento invernal para distintos animales.
Sin embargo, los álamos son más conocidos por tener uno de los mayores sistemas de raíces del mundo vegetal. Las raíces se extienden por medio de chupones subterráneos y forman una colonia que puede extenderse con relativa rapidez, cubriendo grandes áreas. Los álamos temblones individuales pueden vivir hasta 150 años, pero el organismo más grande bajo el suelo puede vivir miles de años.
En el estudio de esta semana, queremos descubrir algunas de las raíces de nuestra inquietud. Hay muchas cosas que pueden impedirnos encontrar el verdadero descanso en Jesús. Algunas de ellas son obvias y no requieren mucha atención. Otras pueden ser menos obvias para nosotros y, como ocurre con el enorme organismo del álamo que no se ve bajo la tierra, no siempre somos conscientes de las actitudes y acciones que nos separan de nuestro Salvador.