Hebreos 1:2 contiene una frase curiosa: “en estos últimos días”. ¿En qué sentido vivían los hebreos en los últimos días, expresión que también utilizamos para identificar “el tiempo del fin”?
Los profetas utilizaron diferentes formas de la expresión en distintos sentidos. Deuteronomio 4:30 y Jeremías 23:20 hablaron de los “últimos días” para indicar algún momento en el futuro en el que se cumplirían sus predicciones. Sin embargo, Daniel también utilizó la expresión “el tiempo del fin” para identificar más específicamente los últimos días de la historia de la tierra (Daniel 8:17, 12:4).
Jesús había cumplido muchas de las promesas de Dios durante y después de su estancia en la tierra. Naturalmente, los primeros cristianos tenían grandes esperanzas de que Su regreso y el establecimiento de Su Reino celestial se cumplieran pronto, quizás incluso durante su vida. Un estudio cuidadoso de Daniel, sin embargo, indica que el tiempo del fin que ellos estaban anticipando no ocurriría hasta después del final de la profecía de 2300 días/años de Daniel (Daniel 8:14), un período de tiempo que creemos comenzó en 1844.
Lo que los hebreos sí sabían era que la mayoría de las promesas ya se habían cumplido a través de Jesús. Su resurrección, su liberación del poder de Satanás, y la nueva vida espiritual que Él les dio eran todo lo que necesitaban para continuar con alegría sus viajes de fe con confianza y fuerza.