Para finalizar su obra, DIOS utiliza tanto los poco instruidos como los muy instruidos. Todos tienen una parte que hacer, cada uno según su don. Incluso aquellos que no saben leer o escribir, pueden hacer algo importante. Es DIOS quien capacita para Su obra. Así como toda buena empresa, al contratar a un nuevo empleado, le da el debido entrenamiento, DIOS prepara aún mucho más a sus obreros para que sean exitosos.
Que Dios los bendiga y que los siga utilizando grande mente soy un fiel televidente y me gusta su programa.
mandemen estudios