Recapitulando un poco La mayordomía, es la siguiente: DIOS nos bendice para que seamos conductos de bendiciones a otros. Por el principio verdadero de que todo pertenece a DIOS, pero que Él creó para que pudiéramos disfrutar, Él requiere que devolvamos el 10% de lo que nos dio. Eso es el diezmo. También pide que donemos otro porcentaje que decidamos, para el sustento de la obra de la salvación. Con ese sistema, bien simple, nosotros, los que ya hemos sido salvos por JESÚS, podemos financiar el trabajo de los pastores y obreros que se dedican exclusivamente a la enseñanza del plan de la salvación.
El santuario, por lo que vemos, tiene el mismo objetivo de la mayordomía: salvar a las personas. Pero hay una diferencia: por el santuario vemos la acción de JESÚS; por la mayordomía, es nuestra acción que entra en el sistema de salvación.
