Tema transversal de la semana se trata de Job quien era un hombre santo en donde el espíritu santo estaba trabajando, él se sacrificó y todos los días era un regalo personal a Dios. Sabemos que Dios es quien obra en nosotros la justificación, el perdón y la santificación, para que así podamos llevar una vida de acuerdo a la ley de Dios.
Dios nos ha creado semejantes a él y somos libres para hacer todas las opciones que nos enfrentamos, es más, somos hasta capaces de elegir nuestra salud de estar bien o enfermos, igual para ser santificados o quedarnos en la descomposición en el pecado todos los días, porque si nosotros elegimos la vida, Dios el padre nos justifica con la vida de Jesús por las cosas que Jesús hizo por nosotros, de esta manera proporcionando un cambio gradual en la vida cotidiana. Y a medida que va pasando el tiempo nos damos cuenta que los viejos gustos ya nos son tolerados cuando antes de estos gustos disfrutabas, entonces esto es el proceso de la santificación.