Leccion 1 Maestros – Adulterio Espiritual – Sabado 6 de Abril de 2013

Edicion Maestros – Sabado 6 de Abril de 2013

Adulterio Espiritual

Lección 1 // MATERIAL AUXILIAR PARA EL MAESTRO

El sábado enseñaré…
Textos clave: Oseas 2:23.
Enseña a tu clase a:
Saber reconocer la intolerancia de Dios hacia el pecado y su amor hacia la gente.
Sentir el amor de Dios hacia los pecadores y amarlos como Dios los ama.
Hacer: Someterse al plan de Dios y alabarlo porque nos acepta.
Bosquejo de la lección:
I. Saber: Dios no puede tolerar la desobediencia obstinada
A. ¿Por qué Dios le mandó a Oseas casarse con Gomer, una mujer pro-miscua?
B. ¿Qué nos dice este casamiento acerca de la condición de Israel antes del exilio a Asiria?
C. ¿De qué forma utilizó Dios el ejemplo de Oseas para llamar la atención de Israel hacia las relaciones reales en la vida?
II. Sentir: El amor incondicional y generoso de Dios
A. ¿Qué nos dice este libro acerca del amor de Dios y de su condescen-dencia hacia nuestro nivel humano de comprensión y conducta?
B. ¿Por qué Dios ama tanto a los humanos y está preocupado por ellos?
C. ¿Cómo te hace sentir el saber que los esparcidos serán reunidos de nuevo, los no amados serán amados otra vez y los que eran llamados no-su-pueblo serán adoptados como sus hijos?
III. Hacer: La gracia de Dios revierte la situación
A. ¿Por qué el perdón de Oseas hacia su descarriada esposa es tan inquie-tante e importante para nuestra iglesia actual?
B. Piensa en los actos de gracia de Dios hacia los pecadores. ¿De qué mo-do nos ayudan a tratar a los que yerran en contra de nosotros o alrede-dor de nosotros?
Resumen: Cuando volvemos a Dios en respuesta a su llamado de amor, él nos perdona, cambia nuestra condición, nos bendice y nos conduce a una vida nueva.

Ciclo de aprendizaje
Concepto clave para el crecimiento espiritual: Dios es como un esposo amante y preocupado, y su pueblo es como su novia. Esta relación de esposo-esposa se dramatiza en la vida de Oseas, profeta de Dios, a quien Dios le pidió que se casara con una mujer promiscua. El amor profundo, per- dona-dor, tierno y persistente de Dios es un modelo de fidelidad para nuestra rela-ción de amor con él y con nuestro cónyuge.

1: ¡Motiva!

Texto destacado: Oseas 3:1-3.
• Solo para los maestros: Esta lección inicia el estudio de los doce Profetas Menores del Antiguo Testamento. Aun cuando se los llama “menores”, estos do-ce profetas son mayores. La distinción de “menor” se refiere solo a la relativa brevedad de sus libros en comparación con los libros más extensos de Isaías, Jeremías, Ezequiel y Daniel.
El término “los doce” se mencionó por primera vez en el siglo segundo antes de Cristo (alrededor de 180 a.C.), en un libro apócrifo, el Eclesiástico (o Sirac, 49:10). Josefo también conocía el término (Contra Apión, 1.8.3). Es interesante que cada uno de los doce libros es citado por lo menos una vez en el Nuevo Testamento (el más citado es Zacarías). Presta atención al significado de los nombres de los Profetas Menores, porque cada nombre transmite el mensaje ampliado y explicado en el libro respectivo.
Análisis inicial: Si tuvieras la oportunidad de cambiar tu nombre, ¿cuál ele-girías? ¿El nombre de qué personalidad del pasado o del presente quisieras llevar? Si prefirieras tener varios nombres, en lugar de solo uno, ¿cuáles se-rían? ¿Por qué las personas aprecian que sepas cómo se llaman y las mencio-nes por su nombre? ¿Qué hay de importante en cuanto a los nombres? ¿Qué revelan acerca de nosotros y cómo definen nuestro carácter? ¿Qué función desempeñan los nombres bíblicos en comparación con los nuestros?
Preguntas para dialogar:
1. ¿Por qué el pueblo de Dios necesita profetas? ¿Qué tiene de específico e irreemplazable el rol de ellos?
2. ¿Por qué tan a menudo la voz profética es perturbadora? ¿De qué forma los mensajes proféticos son positivos o negativos? ¿De qué manera podemos, en nuestra mente, conciliar que, en el mismo libro, se expresen mensajes de condenación y destrucción, y mensajes de esperanza y restauración?

2: ¡Explora!

Solo para los maestros: El nombre Oseas significa “salvación”, que es el tema principal de su libro. Su mensaje enfatiza el amor redentor de Dios a través de la vida personal de Oseas y su actitud hacia su esposa infiel. Sé cuidadoso y presenta este libro de una forma inteligente, porque es una historia con elemen-tos perturbadores y hasta escandalosos. No pongas la Ley de Dios en contradic-ción con su carácter amante; más bien, concéntrate en la intención principal de este dramático mensaje, es decir, el asombroso amor y la fidelidad de Dios como el Esposo. En ese tiempo, podía esperarse la expulsión o aun el apedreamiento de la mujer adúltera. En este relato, la reacción de Dios frente a la profunda de-cadencia espiritual, moral y política de la Nación nos muestra su actitud de preo-cupación por los pecadores.
Comentario de la Biblia
Oseas actuó en el siglo VIII a. C., y su ministerio duró varias décadas (Oseas 1:1). Fue el único profeta oriundo del Reino del Norte. Enviado por Dios para entregar su mensaje de arrepentimiento a ese reino, la tarea que se le asignó fue ayudar a evitar la tragedia del cautiverio asirio y la caída de Sama-ria, la capital (722 a.C.). Si los líderes y el pueblo hubiesen escuchado a Dios, se habrían ahorrado esas calamidades, y una tragedia nacional y personal.
Los profetas no solo eran voceros de Dios; algunas veces se les pidió ac-tuar o vivir su mensaje, como en el caso de Isaías (Isaías 20:2-4), Miqueas (Miqueas 1:8), o Ezequiel (quien realizó doce acciones simbólicas: Ezequiel 3:26, 27; 4:1-3; 4:4, 5; 6-8; 9-17; 5:1-4; 12:1-6; 17-20; 21:6, 7; 18-23; 24:15-26; 37:15-23). El propósito era sacudir al pueblo para sacarlo de su obstinación y guiarlo a tomar nuevas decisiones por Dios y su verdad, apartándose de los dioses extraños, la inmoralidad y la conducta no ética.
I. El casamiento de Oseas
(Repasa, con tu clase, Oseas 1-3)
De una forma muy inusual, dramática y espectacular, Dios le pidió a Oseas que viviera su mensaje. Aunque las opiniones de los eruditos varían con res-pecto a ciertos aspectos de la interpretación de Oseas 1 al 3, la mejor eviden-cia disponible nos conduce a la siguiente conclusión: el profeta debía casarse con Gomer, una mujer promiscua que ya tenía hijos de sus anteriores relacio-nes ilícitas (Oseas 1:2). Se da la razón: “Porque el país se ha prostituido por completo. ¡Se ha apartado del Señor!” (NVI). Así, la vida familiar de Oseas lle-gó a ser una parábola viviente de la relación del Señor con Israel.
Oseas tuvo tres hijos con Gomer, su esposa. Los nombres de esos niños también son un mensaje. El primogénito fue un varón, Jezreel (que significa “Dios esparce”); seguido por una hija, llamada Lo-Ruhama (que significa “No amada”); y finalmente, nació otro varón, Lo-Ammi (que significa “No mi pue-blo”). Dios mismo eligió esos extraños nombres. Cada vez que Oseas los men-cionaba al pueblo, este tuvo que haberse detenido a pensar, pues la intención
era darle una sacudida. Era un mensaje muy fuerte, que no se podía pasar por alto fácilmente.
Considera: ¿De qué forma el casamiento de Oseas sirvió como una pará-bola viviente de la relación de Dios con Israel? ¿Qué impacto debieron haber tenido los nombres de los hijos de Oseas sobre los corazones del pueblo?
II. Crisis en el casamiento de Oseas
(Repasa, con tu clase, Oseas 3:2, 3.)
El evento descrito en el capítulo 3 continúa la experiencia del capítulo 1. Gomer debería haber estado enormemente agradecida a Oseas por haberla aceptado y perdonado, por elevarla a la situación de una esposa legal, así co-mo por proveer para toda la familia. En lugar de abrazar este amor generoso, ella le fue infiel. A pesar del repetido adulterio, Oseas fue un esposo preocupa-do y no repudió a Gomer, ni la expuso al severo castigo que se aplicaba en ese tiempo a la mujer infiel (que aun resultaba en la muerte). En cambio, le mostró misericordia y amor. La redimió pagando por su libertad un equivalente a treinta siclos (la mitad en efectivo y la mitad en bienes; ver Oseas 3:2; y comparar con 2 Reyes 7:1, 16, 18). La llamó suavemente para que regresara: “Tú serás mía durante muchos días; no fornicarás, ni tomarás otro varón; lo mismo haré yo contigo” (Oseas 3:3).
Pregunta para dialogar: ¿Cómo trató Oseas a Gomer, a pesar de su falta de fidelidad? ¿Qué castigo merecía ella, según la ley? ¿De qué modo el trato de Oseas con Gomer reveló el amor redentor de Dios por Israel? Con respecto a esto, analiza con tu clase el sacrificio máximo de amor de Cristo en nuestro favor, que sigue siendo, para los esposos, un modelo de la manera en que de-berían amar generosamente a sus esposas (Efesios 5:25).
III. El amor de Dios es incomprensible
(Repasa, con tu clase, Oseas 2:7.)
Así como Gomer seguía a sus amantes y cometía adulterio, Israel cometía adulterio contra Dios al participar de los cultos de fertilidad de Baal y otros dio-ses extraños (Oseas 2:7). Dios proveyó todo para su pueblo, y una y otra vez lo perdonó y lo atrajo de nuevo hacia sí. Ordenó a Oseas amar a Gomer “como ama el Señor a los israelitas” (3:1, NVI). Dios esperaba que su relación de amor con Israel los llevara a cambiar de actitud, arrepentirse y volver a ser fie-les: “Iré y me volveré a mi primer marido; porque mejor me iba entonces que ahora” (2:7). Él anhelaba mostrarle a ella su amor: “Y te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, juicio, benignidad y misericor-dia. Y te desposaré conmigo en fidelidad, y conocerás a Jehová” (2:19, 20).
Dios demostró su amor por su pueblo al cambiar los nombres de los hijos de Oseas. Este es un mensaje poderoso y un completo cambio de situación. El nombre de Jezreel ya no sería “Dios esparce”, sino “Yo plantaré”. Lo-Ruhama ya no sería más “No amada”, sino “Te mostraré mi amor”. Finalmente, Lo- Ammi ya no sería más “No pueblo mío”: su nombre nuevo sería “Tú eres mi pueblo”. ¡Cuán increíble es el amor de Dios por su pueblo! La única respuesta apropiada para el tan grande amor de Dios, nuestro verdadero Esposo, es “Tú eres mi Dios”. (Estudia con cuidado Oseas 2:23.)
Considera: ¿De qué forma el cambio de nombres de los hijos de Oseas refleja un cambio en su situación? De acuerdo con Apocalipsis 2:17, Dios le da-rá a cada uno de sus seguidores un nombre nuevo. ¿Qué te gustaría que refle-jara tu nuevo nombre?

3: ¡Aplica!

• Solo para los maestros: En nuestra sociedad promiscua, la falta de fideli-dad a Dios y a nuestros cónyuges es un problema tremendo. Ayuda a tu clase a comprender la importancia de tener relaciones saludables y conversen sobre el modo en que podemos cultivarlas.
Preguntas de aplicación:
1. ¿De qué manera podemos cultivar nuestra verdadera devoción a Dios, y mostrarla de forma práctica en nuestras familias?
2. ¿Cuáles son los objetos, situaciones y problemas que nos distraen de ser completamente devotos a nuestro Dios y a nuestro cónyuge?
4: ¡Crea!
• Solo para los maestros: Oseas 1 al 3 es una parábola de nuestra vida. La fidelidad, el cuidado y el amor deben verse claramente. Ayuda a tu clase a apre-ciar este cuadro de Dios de una manera vivida.
Actividades:
1. Pide a tu clase que escriba un breve guion sobre el mensaje de Oseas 1 al 3. Tanto como sea posible, incluye a todos los personajes de la histo-ria e incorpora la perspectiva y la voz de Dios. Si es aplicable, pide al grupo de jóvenes de tu iglesia que lo represente en público.
2. Analiza con la clase lo que significan para cada uno las promesas de Dios “yo plantaré”, “yo te mostraré mi amor” y “tú eres mi pueblo”.

Radio Adventista
1 comment… add one
  • La fidelidad a la pareja va mas lejo de que: solo te soy fiel por que te amo o solo te soy fiel por que me gusta o solo te soy fiel porque tu me eres fiel;debemos ser fiel a nuestra pareja primero por que es un mandato de Dios y 2do,3ro,4to por todos los mencionados al inicio del parrafo.

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