Adoren al Creador (2Q 2023—Tres Mensajes Cósmicos)
Material bíblico: Apoc. 1:9, Isa. 40:26, 2 Cor. 5:17, Col. 1:17, Apoc. 4:11, Juan 19:16–30.
Citas
- No creeré que el universo se formó por una casualidad de átomos, del mismo modo en que no creería que el juntar al azar las letras del alfabeto resultara en un tratado de filosofía ingenioso. Jonathan Swift. (Escritor de “Los viajes de Gulliver”).
- La naturaleza es el arte de Dios. Thomas Browne
- La posteridad se reirá algún día de la tontería de la filosofía materialista moderna. Cuanto más estudio la naturaleza, más me asombra el Creador. Louis Pasteur
- El argumento del diseño es irresistible. La naturaleza testifica acerca de su Creador. John Stuart Mill
- Las leyes de la ciencia, tal como las conocemos en la actualidad, contienen muchos números fundamentales, como el tamaño de la carga eléctrica del electrón y la proporción de las masas del protón y el electrón… El hecho notable es que los valores de estos números parecen haber sido finamente ajustados para hacer posible el desarrollo de la vida… Se puede tomar esto como evidencia de un propósito divino en la Creación y la elección de las leyes de la ciencia o como apoyo al principio antrópico fuerte. Stephen Hawking, “Breve historia del tiempo”.
- Una interpretación de sentido común de los hechos sugiere que un superintelecto ha manipulado la física, así como la química y la biología, y que no hay fuerzas ciegas que valgan la pena mencionar en la naturaleza. Astrónomo Fred Hoyle
Preguntas
¿Por qué el concepto de un Creador está tan diametralmente opuesto a las creencias de muchas personas hoy en día? ¿Por qué es tan significativo el llamado a adorar al Creador? ¿Realmente se puede decir que la Creación es científica? ¿Qué diferencia hace si se cree o no en Dios como Creador? ¿Cómo podemos compartir mejor los conceptos de la Creación con aquellos que nos rodean? ¿Qué hay de la gran controversia?
Resumen bíblico
Juan escribe desde su sufrimiento en Patmos (Apoc. 1:9). Isa. 40:26 señala hacia los cielos y pregunta “¿quién creó todo esto?” Somos nuevas creaciones en Cristo (2 Cor. 5:17). “Señor y Dios nuestro, eres digno de recibir la gloria, el honor y el poder, porque tú creaste todas las cosas. Por tu voluntad existen y fueron creadas.” Apoc. 4:11. Juan 19:16–30 es el relato de la crucifixión de Juan.
Comentario
Desde el primer verso de la Biblia, no nos queda ninguna duda. Todo este vasto universo fue hecho solo por Dios. En ninguna parte se sugiere que el universo sea un “accidente” o que haya surgido por sí solo. Más bien, es directamente hecho por Dios y hablado a la existencia. Creer que el universo no fue creado sino que simplemente “apareció” requiere una fe muy grande y verdaderamente ciega.
Solo Dios es responsable. Y como única fuente de todo, incluyendo la vida misma, Dios el Creador es necesariamente el único que debe ser adorado por todo ser en todo el universo. La misma definición de Dios se relaciona con su papel como Creador, porque si no hubiera creado, ¿qué tipo de “Dios” sería? La llamada a la existencia de todo demuestra el poder, la supremacía, la creatividad, la generosidad y el altruismo de Dios.
Solo por estar allí, las estrellas del universo testifican sobre un Creador, un Gran Diseñador, un Creador todopoderoso. Esa es su “palabra” y “conocimiento” que debería decirte que realmente hay un Dios, ¡entre todo lo demás! Dios mismo te invita a echar un vistazo a lo que ha hecho y darte cuenta de que Él hizo cada púlsar y planeta, cada galaxia y constelación, y nombró cada una de esas diez mil billones de estrellas.
No es de extrañar que David mirara hacia arriba y dijera: “Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que has puesto en su lugar, ¿qué es el hombre para que en él pienses, el hijo del hombre para que lo cuides?” (Salmo 8:4,5 NVI) La absurdez de aquellos que afirman que todo lo que les rodea “simplemente sucedió” y que no hay Dios creador lleva a la Biblia a describirlos como “necios” (Salmo 14:1; Romanos 1:22). El argumento del ser, del diseño, del orden en todo el universo debería ser suficiente para creer en una inteligencia creativa detrás de todo ello.
A medida que entendemos más y más sobre el universo en el que vivimos, el argumento a favor de un Creador se vuelve cada vez más convincente. Tomemos, por ejemplo, lo que se ha llamado el “Principio Antrópico”. Este principio propone que el universo, el lugar físico en el que vivimos, tiene características que parecen indicar que fue diseñado deliberadamente para la vida y nuestra existencia. De hecho, hay tantos factores específicos que necesitan ser “justo así” que ahora es ridículo creer que nuestro universo es un evento aleatorio. El número de “accidentes” que necesitarían ocurrir para formar un universo favorable a la vida es simplemente inmenso y ninguna persona razonable podría creer que este fue el proceso. Incluso aquellos científicos que quieren negar un Dios creador no pueden negar la imposibilidad de la formación aleatoria de nuestro universo por procesos accidentales. La posibilidad es simplemente demasiado remota. Las constantes físicas del universo tienen que ser exactamente como son, o el universo no se habría formado, o habría sido un lugar donde la vida no podría existir:
Las propiedades extremadamente precisas y críticas que se necesitan para que el universo se forme en primer lugar también apuntan a un diseño y propósito muy cuidadosos. Hablando sobre el supuesto Big Bang, Hawking también explica que si la velocidad de expansión hubiera sido ligeramente mayor, entonces el universo se habría expandido demasiado rápido y no se habrían formado galaxias. Muy ligeramente más lento y el universo se habría colapsado sobre sí mismo. Hawking estima que incluso una disminución de una parte en un billón habría resultado en el colapso del universo hace mucho tiempo, mientras que un aumento similar habría impedido la formación de galaxias. Una parte en un billón. Probabilidades muy pequeñas. Luego, agregue algunos otros aspectos que si ocurrieran al azar serían extremadamente improbables. Si la diferencia de masa protón-neutrón no fuera exactamente como es, entonces solo habría protones o neutrones. ¡No habría química en absoluto, y no habría vida! Si la fuerza nuclear débil (una de las fuerzas que mantiene unida la materia) hubiera sido ligeramente más débil, todo el hidrógeno en el universo sería ahora helio. Tampoco es genial para la vida. Si la fuerza nuclear fuerte hubiera sido un 2 por ciento mayor, entonces los protones (en el centro de los átomos) no podrían haberse formado. Si la misma fuerza hubiera sido un 5 por ciento menor, no habría estrellas. El universo está afinado de una manera tan sorprendente que la única conclusión razonable es un diseño creado. Para tener las condiciones adecuadas para que el universo incluso exista, y mucho menos para la vida, nuestro universo debe estar equilibrado en el borde de una navaja cósmica.
La conclusión de Stephen Hawking, al mirar la forma en que se cree que comenzó el universo, es que “Sería muy difícil explicar por qué el universo debería haber comenzado de esta manera, excepto como el acto de un Dios que tenía la intención de crear seres como nosotros”. ¡Una impresionante admisión de que es ciertamente científico aceptar la teoría de un Dios Creador!
Comentarios de Ellen White
Por lo tanto, a través de la creación debemos familiarizarnos con el Creador. El libro de la naturaleza es un gran libro de lecciones, que en conexión con las Escrituras debemos usar para enseñar a otros acerca de Su carácter y guiar a las ovejas perdidas de regreso al redil de Dios. A medida que se estudian las obras de Dios, el Espíritu Santo envía convicción a la mente. No es la convicción que produce el razonamiento lógico, pero a menos que la mente se haya vuelto demasiado oscura para conocer a Dios, el ojo demasiado débil para verlo, el oído demasiado sordo para escuchar su voz, se captura un significado más profundo, y las sublimes y espirituales verdades de la palabra escrita se imprimen en el corazón. {COL 24.1}
