Pablo explicó la justificación a los Gálatas, así como a todos los que predicaba. Justificar es hacer exento de pecado quien fue pecador y se arrepintió. Esto no puede ser hecho por mérito, o por derecho de un pecador, pues él así no cambia su estado de pecador, además de no tener derecho alguno. Quien cambia el estado de una persona es el ESPÍRITU SANTO, por medio de la santificación, un procedimiento secuencial de mejoras continuas, día a día. Justificar es: legitimar, disculpar, perdonar, eximir, escusar, inocular, absolver, ilí, rehabilitar, regenerar, salvar, rescatar, redimir. Por lo tanto, atención, la justificación no es un acto por el cual nos volvemos perfectos. Continuamos teniendo la naturaleza pecadora, pero estamos arrepentidos, es decir, rebelados contra nuestra vieja naturaleza. La persona es considerada justa o recta aun siendo pecadora; Sólo después, con la venida de JESUCRISTO es que la persona será transformada. Pero hay un punto que debemos prestar atención: sólo los que se justifican un día serán transformados.
Escuela Sabática Texas USA Lección 4: “Justificación solo por la fe” Sábado 22 de Julio.
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