Escuela Sabática Texas USA Lección 3: “¿Dios o Mamón?” sabado 20 de enero

Todos somos criaturas. Hemos sido creados por Dios, no aparecemos en el mundo por casualidad y evolucionamos hasta llegar al punto de hoy, y ahora, paramos de evolucionar; por el contrario, estaríamos retrocediendo. Si fuimos creados, Dios nos hizo de tal manera que necesitamos adorar al Creador. Esto debido a la necesidad que tenemos de amar, sea el Creador, sea otras personas. Adorar en el contexto divino es lo mismo que amar. Para dañar esta necesidad de amar, Satanás está apagando el amor, de casi todos, sustituyendo por un sentimiento frío y egocéntrico, que necesita dominar, explorar, manipular y dañar al prójimo, no importando con sus sentimientos.

De la necesidad de amar, o, de adorar, resulta que, las personas abandonando a DIOS, acaban, de todos modos, adorando algo distinto de DIOS. O adoran ídolos como los del fútbol, ​​de artistas, de políticos, de famosos, su propio cuerpo, etc. O adoran cosas, como las riquezas, el estatus, el poder y la capacidad de imponerse sobre los demás. Incluso los fríos, los de sin sentimiento, aquellos que perdieron la capacidad de amar, adoran algo, por ejemplo, a Mamón y la codicia que llega a tomar del otro lo que no le pertenece. Cualquier adoración es al menos un tipo de dependencia de lo que adora, como las personas se vuelven dependientes de la moda, del consumismo, de las riquezas, de la fama, de la belleza, de los ídolos humanos, de los equipos de fútbol, ​​de los conjuntos musicales, etc. Incluso los ateos dependen de algo fuera de ellos, como podría ser el amor a sí mismos, la dependencia del dinero, o del currículo. De alguna manera, todo ser humano, no importa la condición en que haya llegado, adora algo, aunque no sea DIOS.