El que tuvo una actividad muy intensa fue la de Jesús, el Padre y el Espíritu Santo, pero el trabajo mucho más con intensidad fue el hijo desde la creación hasta la venida de Jesús, sin embargo es muy importante la acción del Espíritu Santo para traernos la vida eterna.
El problema más grande o fatal es resistirse al Espíritu Santo porque el solo quiere transformar, así es que damos paso al pecado en contra de la trinidad, si impedimos al espíritu Santo ¿Cómo podríamos alcanzar la salvación?
El mundo está cada vez más desorden, la corrupción crece cada vez más día tras día, el sistema político también pierde su credibilidad y las personas están en busca de nuevo líder, ya no debemos buscar líder de este mundo sino que en alguien más fiable como nuestro Señor.
