El fruto del Espíritu es el amor, paciencia, bondad es la verdadera esencia en la vida de un cristiano, el fruto del Espíritu no nos indica de que una persona sea capaz de hacer cosas para Dios usando dones o talentos espirituales, no, sino que nos muestra como el hombre o la persona vive para Dios.
Porque debemos comprender que el fruto del Espíritu Santo no se logra con el esfuerzo humano. Podemos lograr algunos dones con algunos esfuerzos pero esto no se compara con los dones del espíritu santo, lo que nosotros logramos con nuestros esfuerzos es algo como si fuera de plástico comparado con el real, el fruto real crece de a poco gracias a la raíz de una relación con Dios, una vez que el Espíritu nos conecta con Jesús a través de su palabra escrita en la biblia.