Bosquejo de la lección 7 – El descanso, las relaciones y la salud – Sábado 14 de Agosto de 2021

“Como José fue vendido a los paganos por sus propios hermanos, así Cristo fue vendido a sus más acérrimos enemigos por uno de sus discípulos. José fue acusado falsamente y metido en la cárcel a causa de su virtud; así Cristo fue despreciado y rechazado porque su vida justa y abnegada era un reproche al pecado; y aunque no era culpable de ningún mal, fue condenado por el testimonio de falsos testigos. Y la paciencia y la mansedumbre de José bajo la injusticia y la opresión, su pronto perdón y su noble benevolencia hacia sus hermanos antinaturales, representan la resistencia implacable del Salvador a la malicia y el abuso de los hombres malvados, y su perdón, no sólo de sus asesinos, sino de todos los que han acudido a él confesando sus pecados y buscando el perdón”. – Ellen G. White, Patriarcas y Profetas, pp. 239, 240.

“Nada puede justificar un espíritu implacable. El que no tiene misericordia hacia los demás demuestra que él mismo no es partícipe de la gracia perdonadora de Dios. En el perdón de Dios, el corazón del descarriado se acerca al gran corazón del Amor Infinito. La marea de la compasión divina fluye hacia el alma del pecador, y de él hacia las almas de los demás. La ternura y la misericordia que Cristo ha revelado en su propia y preciosa vida se verán en aquellos que se hagan partícipes de su gracia”. – Ellen G. White, Christ’s Object Lessons, p. 251.

 

Preguntas para la discusión:

  1. Alguien dijo una vez: “No perdonar es como beber veneno esperando que la otra persona muera”. ¿Qué significa esta afirmación?
    ¿Cuál fue el propósito de todos los elaborados planes que hizo José antes de la revelación de su identidad? ¿Qué supuso para él y para sus hermanos?
  2. El mayordomo de José debió de estar al tanto de algunos de los complots relacionados con los hermanos de José (por ejemplo, Gn. 44:1-12). ¿Cómo afecta la experiencia del perdón a los que sólo son observadores?
  3. “Dios nunca conduce a sus hijos de otra manera que la que ellos elegirían ser conducidos, si pudieran ver el fin desde el principio, y discernir la gloria del propósito que están cumpliendo como colaboradores con él”. – Ellen G. White, El Deseo de Todas las Gentes, pp. 224, 225. Piensa en tu propia vida al contemplar esta declaración. ¿Cómo podría la comprensión de esto ayudarnos a superar muchas de las pruebas y luchas que enfrentamos?
Radio Adventista
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