A causa de la transgresión de nuestros primeros padres, que sabían acerca de esa posibilidad y de sus consecuencias, nos convertimos en castigo eterno, la muerte. Pero, a causa del amor de Dios por nosotros, se posibilitó que en CRISTO fuésemos restaurados y adoptados como hijos, hermanos del Salvador. Para ello se convirtió en uno de nosotros. La salvación envuelve la fe, es decir, sólo se beneficiarán aquellos que creen en el Salvador y acepten vivir como Él, atravesando aquí en la tierra el camino estrecho. Camino estrecho significa abstenerse de muchas cosas que a los ojos de pecadores parecen maravillosas, para esperar por las cosas realmente maravillosas que sólo tendremos en la eternidad, que aquí no están disponibles.
Asc. Metropolitana MX. Leccion 8 “De esclavos a herederos”, Sabado 19 de agosto 2017
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