Jonathan Gallagher Lección 8. “La creación: El Génesis como pilar – Primera parte” 2do Trimestre del 2020.

Leccion 8. La creación: El Génesis como fundamento, Parte 1 (2T 2020—Cómo interpretar las Escrituras)

Textos bíblicos: Juan 1:1–3, Gen. 1:3–5, Éxodo 20:8–11, Apoc. 14:7, Mateo. 19:3–6, Rom. 5:12.

Citas
• Al principio, Dios creó el cielo y la tierra… [Pero] para el científico que ha vivido por su fe en el poder de la razón, la historia termina como un mal sueño. Ha escalado las montañas de la ignorancia, está a punto de conquistar el pico más alto; [y] mientras se extiende hacia la roca final, es recibido por una banda de teólogos que han estado sentados allí durante siglos. Robert Jastrow
• El cristianismo ha luchado, aún lucha, y continuará luchando contra la ciencia hasta el final desesperado sobre la evolución, porque la evolución destruye por completo y finalmente la razón por la que supuestamente se hizo necesaria la vida terrenal de Jesús. Destruye a Adán y a Eva, y al pecado original; y en los escombros encontrarás los restos lamentables del Hijo de Dios. Si Jesús no fue el redentor que murió por nuestros pecados, y esto es lo que significa la evolución, entonces el cristianismo no es nada. G. Richard Bozarth
• Si la Biblia se equivoca al decirnos de dónde venimos, ¿cómo podemos confiar en que nos diga hacia dónde vamos? Justin Brown

Para debatir
¿Por qué es importante tener este “Génesis como fundamento” en un concepto de orígenes revelado en la Biblia? ¿Qué importa de dónde venimos? ¿Cómo encontramos significado y propósito en el universo? ¿Es solo una cuestión de cómo nos sentimos? ¿Cómo cambian las opiniones de nuestros orígenes la forma en que vemos las cosas, especialmente las espirituales? ¿Qué ejemplos del Nuevo Testamento nos ayudan aquí?

Resumen bíblico
Juan 1: 1–3 nos dice que la Palabra fue el agente activo en la Creación. Génesis 1: 3–5 es el relato de la creación de la luz. Éxodo 20: 8-11 es el mandamiento del sábado, un recordatorio de la creación. El mensaje del primer ángel es un llamado a adorar al Creador (Apoc. 14: 7). Jesús hizo referencia a la Creación, al responder una pregunta sobre el divorcio, recordándole a las personas que no era así como se hacían las cosas al principio (Mateo 19: 3–6). Rom. 5:12 explica cómo entró el pecado al mundo.

Comentario
Cuando volvemos a ver cómo interpretar las Escrituras, nos damos cuenta de que el relato bíblico de los orígenes no es “solo una opción”. Las creencias acerca de dónde venimos nos afectan profundamente. Incluso ahora, en una conversación, una de las primeras preguntas es “¿De dónde eres?” Creemos que podemos saber mucho simplemente identificando el lugar de nacimiento y educación de una persona. Del mismo ocurre para nosotros como seres humanos. Hace una gran diferencia si creemos que estamos hechos a imagen de Dios o que somos descendientes del limo primitivo. Entonces, a medida que estudiamos los conceptos en Génesis, debemos recordarnos que esta es nuestra herencia, que somos hijos de Dios, creados por él, y no hechos para esta existencia defectuosa y deficiente, sino para un mundo sin pecado, donde mora la justicia.
Los textos del Nuevo Testamento citados al comienzo de este estudio son principalmente para indicar la aceptación continua del relato de la creación en los evangelios y los escritos de la iglesia primitiva. Que Jesús claramente aceptara la veracidad del Génesis es un punto importante a tener en cuenta. ¿Por qué debería dudarse de esto, si Jesús es Dios, y “sin él nada de lo que ha sido fue hecho? Jesús como Creador no es una perspectiva que escuchamos a menudo, pero esa es la intención detrás de las palabras de Juan en el prólogo de su evangelio. Los paralelos entre Juan 1 y Génesis 1 a menudo se han notado: son deliberados y están llenos de significado. Sin embargo, el punto más significativo es que Génesis 1 comienza con Dios, sin reservas y sin debate. Juan 1 comienza con la Palabra, igualmente afirmada. La pregunta es en ambos casos, ¿quién es Dios? ¿Quién es este Dios creador, quién es este Jesús la Palabra que viene a revelarlo? El fundamento de la fe es el Dios en el que creemos. Muchos de los argumentos sobre Génesis tienen esto como su agenda oculta, ya que si Dios es como se describe y está tan involucrado con nosotros como él dice, entonces una respuesta de nosotros es esencial. No es de extrañar que muchos descarten al Dios del Génesis porque no quieren un Creador en sus vidas, o modifiquen a este Dios en la “Primera Causa” o el “Relojero Ciego” o alguna otra idea que esté lejos de ser un Padre que busca una relación con cada uno de nosotros. Si la creación de nuestro mundo fue parte de las respuestas de Dios a los problemas en la gran controversia, ¡entonces la creencia en Dios como amoroso y compasivo es seguramente el tema principal que se debe decidir!
Podemos hacer referencia a la semana como evidencia de la Creación en siete días, ya que no existe ningún fenómeno natural que subyazca a esto, a diferencia de los días, los meses y los años. Podemos señalar la institución del matrimonio allí en el Edén, la forma en que Dios pretendía que fueran los esposos y las esposas, y que Jesús respaldó esto cuando se le preguntó sobre el divorcio. Podemos rastrear mucho hasta la Creación, y lamentablemente también hasta la Caída. Porque si no hubiera Caída, ¿por qué necesitaríamos un Salvador?
Entonces, cuando se trata de interpretar la Biblia, y particularmente la forma en que comienza, debemos confrontar los conceptos prevalecientes que rechazan a Dios como Creador y propone un Universo de creación propia que simplemente opera según principios deterministas. Sin embargo, para nosotros como cristianos, la verdad es que solo cuando miramos el Génesis y entendemos cómo este libro refleja la verdad sobre la naturaleza y el carácter de Dios, puede ser útil para nuestras vidas hoy.

Comentarios de Elena de White
Y creó Dios al hombre a su imagen… varón y hembra los creó”. Génesis 1:26-27. Aquí se expone con claridad el origen de la raza humana; y el relato divino está tan claramente narrado que no da lugar a conclusiones erróneas. Dios creó al hombre a su propia imagen. No hay en esto misterio. No existe fundamento alguno para la suposición de que el hombre llegó a existir mediante un lento proceso evolutivo de las formas bajas de la vida animal o vegetal. Tales enseñanzas rebajan la obra sublime del Creador al nivel de las mezquinas y terrenales concepciones humanas. Los hombres están tan resueltos a excluir a Dios de la soberanía del universo que rebajan al hombre y le privan de la dignidad de su origen. El que colocó los mundos estrellados en la altura y coloreó con delicada maestría las flores del campo, el que llenó la tierra y los cielos con las maravillas de su potencia, cuando quiso coronar su gloriosa obra, colocando a alguien para regir la hermosa tierra, supo crear un ser digno de las manos que le dieron vida. La genealogía de nuestra raza, como ha sido revelada, no hace remontar su origen a una serie de gérmenes, moluscos o cuadrúpedos, sino al gran Creador. Aunque Adán fue formado del polvo, era el “hijo de Dios”. {Hijas de Dios, p. 19}
Los hombres se esforzarán por explicar la obra de la creación como resultado de causas naturales, algo que Dios nunca ha revelado. Pero la ciencia humana no puede escudriñar los secretos del Dios del cielo ni explicar las obras estupendas de la creación, que no son sino un milagro del poder del Altísimo, como también son incapaces de explicar cómo llegó Dios a la existencia. {Exaltad a Jesús, p. 53}

Preparado ye escrito por:  © Jonathan Gallagher 2020
Traducción: Shelly Barrios De Ávila

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