Jonathan Gallagher Lección 7. “Compartir la Palabra” 3er Trimestre del 2020.

Leccion 7. Compartiendo la Palabra (3T 2020—Haciendo amigos para Dios)

Textos Bíblicos: Salmos 119:105, Jeremías 23:29, Hebreos 1:1–3,2 Tim. 3:14–17, 1 Juan 1:7–9,
Eclesiastés 3:1, 2 Tim. 4:2, Isaías 55:11.

Citas
• El evangelismo sigue siendo la Palabra de Dios para esta hora. Alan Walker
• El evangelismo nunca pareció ser un “problema” en el Nuevo Testamento. Es decir, uno no encuentra pasajes de los apóstoles instando, exhortando, reprendiendo, planeando y organizando programas de evangelización… ¡El evangelismo simplemente sucedió! Surgió sin esfuerzo de la comunidad de creyentes como nade la luz del sol, fue automático, espontáneo, continuo, contagioso. Richard C. Halverson
• Testificar no es algo que hacemos; es algo que somos. Anónimo

Para debatir
¿Cómo hemos separado nuestras creencias de la manera como vivimos guiados por la Palabra? ¿Qué gran diferencia vemos entre la iglesia primitiva y la iglesia de hoy? ¿Cuál debería ser la motivación principal para compartir la Palabra y cómo funciona esto en la práctica? Si somos testigos de Dios y de lo que él es, ¿qué ven las personas cuando nos miran mientras les hablamos de Dios?

Resumen bíblico
“Tu palabra es una lámpara que me muestra por dónde caminar. Y es una luz en mi camino”. Salmos 119: 105 VBL. El Señor dice que su Palabra es como un fuego y como un martillo que quebranta una roca (Jer. 23:29). “Dios, que en el pasado habló a nuestros padres por medio de los profetas en distintas épocas y de muchas maneras, 2en estos días nos ha hablado por medio de su Hijo. Dios designó al Hijo como heredero de todo, e hizo el universo por medio de él. 3El Hijo es la gloria radiante de Dios, y la expresión visible de su verdadero carácter. Él sostiene todas las cosas con su poderoso mandato. Cuando hizo provisión para limpiar el pecado, se sentó a la diestra de la Majestad del cielo”. Hebreos 1: 1-3 VBL. La Palabra inspirada de Dios es útil de muchas maneras (2 Tim. 3: 14–17). 1 Juan 1: 7–9 nos recuerda que necesitamos caminar en la luz. Hay un momento adecuado para testificar y para todo lo demás (Eclesiastés 3: 1). “Que prediques la palabra de Dios, sea conveniente o no, y dile a las personas lo que están haciendo mal; dales consejo y ánimo. Y enséñales esto con mucha paciencia”. 2 Tim. 4: 2 VBL. La Palabra de Dios cumple su propósito (Isaías 55:11).

Comentario
En el centro de la Palabra hay una afirmación de la verdad que conocemos de manera personal, y de la cual somos testigos. Cualquiera puede debatir una doctrina o dogma, pero nadie puede debatir tu propia experiencia de Dios. Ya hemos considerado esto como parte de nuestro estudio para este trimestre. Pero ahora tenemos que ir más profundo. Porque al compartir la Palabra, somos los vehículos, y tenemos que preguntarnos: “¿Qué ven las personas cuando somos testigos?” Si bien podemos estar predicando la Palabra, podemos estar contradiciéndola con nuestras vidas. Tal como nos lo dice el Nuevo Testamento, somos visibles, de hecho, ¡estamos en un teatro! ¡Tan grande que apenas encaja en el mundo entero, porque este teatro es el mundo! Consideremos este texto: “Nos hemos convertido en espectáculo ante todo el universo, para los ángeles y los seres humanos”. 1 Corintios 4: 9 VBL. Pablo estaba hablando de sí mismo y de los otros líderes de su época, pero ahora se aplica igualmente a nosotros. ¿En qué consiste este espectáculo público? Es una demostración, es algo que la gente puede ver y comprender. Pensemos en esta palabra “espectáculo”. Aquí es donde entra el teatro, y los que saben griego, pueden confirmer que esa es exactamente la palabra que se usa aquí: theatron. Un lugar donde vamos a ver un espectáculo público. Leamos ahora Hechos 19:29, 31, donde se narra la historia sobre los problemas que Pablo tuvo en Éfeso. ¿Recuerdan a los plateros y el miedo que tenían por su comercio de pequeñas estatuas de plata de la diosa Diana o Artemisa, y cómo agarraron a Cayo y Aristarco, los compañeros de viaje de Pablo, y los llevaron al teatro? ¿Cómo era este teatro? No era un pequeño salón con unos pocos asientos. Era un gran anfiteatro con capacidad para 24.500 personas. Todavía se encuentra en Éfeso hoy día. Y la palabra utilizada para este anfiteatro aquí en el libro de Hechos es la misma que para el espectáculo en 1 Corintios 4. ¿Vemos ahora lo que somos? Somos como este gran teatro. ¿Cómo? Por medio de lo que demostramos, lo que en lo que ven los demás. Además la palabra theatron no solo se refería al
edificio. También se refería a la obra, al evento, al espectáculo que se presentaba. ¡Estamos en un escenario! Shakespeare dijo una vez que “el mundo entero es un escenario.” Todos nosotros somos los personajes. El gran drama es la controversia mundial entre Cristo y Satanás, con el planeta Tierra como campo de batalla. Todos somos partes de este espectáculo en el universe. No es simplemente entreteimiento. “El universo entero contempla con interés inefable la obra final de la controversia entre Cristo y Satanás.” (Elana de White, Testimonios para la Iglesia, Tomo 5, p. 496). ¡Somos el espectáculo público, la demostración al mundo entero, a todos los seres no caídos, y a todos los ángeles también! ¡Qué pensamiento más inspirador…! Pero ¿qué estamos demostrando entonces? ¿De qué se trata todo este drama? ¿Cuál es el tema? Recordemos las acusaciones del diablo. ¡Cómo acusó a Dios de ser injusto, de ser egoísta, que eran las faltas mismas del Diablo! ¿Cómo respondió Dios? Demostrándose a sí mismo a través de su pueblo. Esa es su forma elegida, y es la única forma. Por lo tanto, debemos ser sabios en todo lo que hacemos, especialmente al escoger la Palabra y compartirla con los demás. No siempre tenemos que hacerlo físicamente: podemos entrelazar ideas bíblicas en nuestra conversación y compartir verdades sin dar la referencia del texto. Pero necesitamos ser absolutamente fieles a lo que dice la Biblia. No debemos agregar nuestras propias ideas de lo que la Biblia debería haber dicho, como si supiéramos más que el Espíritu. La advertencia al final del libro de Apocalipsis se aplica también a todos los demás
libros bíblicos: “Declaro solemnemente a todos los que escuchan las palabras proféticas de este libro, que si alguno añade algo a estas palabras, Dios le enviará las plagas descritas en este libro. 19Si alguno quita las palabras proféticas de este libro, Dios le quitará su parte en el árbol de la vida y de la ciudad santa que se describe en este libro”. Apocalipsis 22:18, 19 VBL. No debemos atrevernos a manipular las palabras de la Sagrada Escritura. Nuestra predicación y testimonio es un intento de mostrar cómo poner en práctica la Palabra. Necesitamos reconocer la urgencia de nuestra misión de compartir la Palabra. Como escribió Carl Henry: “El evangelio solo es una buena noticia si llega a tiempo”.

Comentarios de Elena de White
Todo estudiante de la Biblia que no solo se familiariza con la verdad revelada a través de la educación del intelecto, sino también a través de su poder transformador en el corazón y el carácter, representará el carácter de Dios en nuestro mundo a través de una vida ordenada y una conversación piadosa. {Special Testimonies onEducation, p. 218} Nuestra obra en favor de los tentados y caídos alcanzará verdadero éxito únicamente en la medida en que la gracia de Cristo vuelva a formar el carácter, y el hombre sea puesto en relación viva con el Dios infinito. {La Temperancia, p. 91}

Preparado y escrito por © Jonathan Gallagher 2020
Traducción: Shelly Barrios De Ávila

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