Los siete sellos de Apocalipsis repasan la misma historia de las siete iglesias. Los sellos describen la experiencia de la iglesia a lo largo de los siglos., comenzando con los famosos cuatro jinetes de Apocalipsis. Los cuatro jinetes retratan el avance del evangelio y las consecuencias de su rechazo. Bienvenidos al bosquejo de la lección de la Escuela Sabática estamos en la lección 5 Que tiene como titulo: Los siete sellos. En el bosquejo de esta semana vamos a dar una breve explicación sobre cada uno de los 6 primeros sellos.
El primer sello (Apocalipsis 6:1, 2) Apocalipsis 6:2 dice que mientras Cristo abre el primer sello, entra en la escena un caballo blanco. Blanco en Apocalipsis siempre representa a Cristo o su pueblo. (Apocalipsis 19:11-16) El jinete tiene un arco (que simboliza conquista) Y una corona. (Que simboliza la victoria) El significado del jinete del caballo blanco representa la difusión del evangelio de Jesucristo, comenzando desde Pentecostés. El segundo sello (Apocalipsis 6:3,4) Al abrir Cristo el segundo sello, se presenta en la escena un caballo rojo-fuego. Rojo es el color de la sangre. El registro muestra que el evangelio siempre divide a las personas. Cuando aceptamos a Cristo tenemos paz, pero podemos sufrir cierto tipo de sufrimiento también. Pero una cosa es clara el rechazo del evangelio siempre resulta en la perdida de paz verdadera.
Por otro lado, como ocurría en el Antiguo Testamento, los enemigos del pueblo de Dios a menudo se volvían los unos contra los otros. En la escena del segundo sello los que resisten y rechazan el evangelio se vuelven y se persiguen entre sí. El tercer sello (Apocalipsis 6:5,6) Las imágenes del Caballo negro y su jinete apuntan a lo que ocurriría a quienes rechazaran el evangelio. En las Escrituras, el grano y el pan simbolizan a la Palabra de Dios (Luc. 8:11), El rechazo del evangelio resulta en hambre de la Palabra de Dios que es similar al hambre espiritual que fue profetizado por Amós con respecto a los israelitas (Amós 8:11-13). Aun cuando la Palabra de Dios sea escasa, el espíritu Santo todavía está trabajando entre la gente, y la salvación todavía está disponible para todos los que la deseen. El cuarto sello (Apocalipsis 6:7, 8) Ahora la biblia dice que se abre el cuarto sello, y entonces aparece un caballo pálido. El color amarillo-verdoso simboliza a la de un cadáver en descomposición. El nombre del jinete es Muerte, y está acompañado por el Hades, el lugar de los muertos. Se les permite destruir a la gente con la espada, hasta una cuarta parte de la Tierra. El caballo pálido transmite la idea de hambre espiritual y típicamente resulta en la muerte espiritual. Sin embargo, la buena noticia es que el poder de la Muerte y del Hades es limitado; Jesús ha ganado la victoria sobre la Muerte y el Hades El quinto sello (Apocalipsis 6:9-11) El quinto sello describe a las almas de los que murieron como mártires por causa del evangelio.
Sólo para aclarar, alma, en la Biblia, denota al “ser completo” (Gén. 2:7) Entonces ahora Juan oye a los mártires clamando por vindicación contra quienes los persiguieron: “¿Hasta cuando, Señor?” (Apoc. 6:10) Dios responde al ruego de los santos martirizados de dos maneras: Primero, se les dan mantos blancos, que significan la justicia de Cristo. (Apocalipsis 6:11) Segundo, Dios promete que él “vengará la sangre de sus siervos” (Apocalipsis 19:2) y deberían esperar un poco mas. La pregunta es: ¿Cuanto tiempo durará esta situación? La respuesta es: duraría el periodo profético de 1.260 días, que significan 1.260 años (Apoc. 12:6, 7). El sexto sello (Apocalipsis 6:12-17) La apertura del sexto sello hecho por Cristo, resulta en señales cósmicas, tales como un oscurecimiento del Sol y la Luna, una caída de meteoros, un terremoto desastroso y una convulsión en el cielo.
Estas señales cósmicas son recordativos predichos por Jesús en Mateo 24:29 y 30, que ocurrirían al final de la tribulación de la Edad Media. La escena concluye con la pregunta retorica de los impíos que están aterrados: Apoc. 6:17 dice: “El gran día de su ira ha llegado y ¿quién podrá sostenerse en pie?” Apocalipsis 7 responde claramente esta pregunta: Los que se han lavado en la sangre del Cordero (Apocalipsis 7:14) Algunas aplicaciones: Debemos considerar las advertencias con temor y temblor y aferrarnos a las promesas de Dios y especialmente lavar nuestras culpas cada día con la sangre del cordero. En otras palabras acercarnos confiadamente al trono de la gracia de Dios para alcanzar misericordia. Esa humildad de reconocer nuestras flaquezas y pedir la intervención divina, sin duda nos colocará en un lugar seguro.
