La palabra griega para el diablo, ‘diabolos’, literalmente significa ‘calumnia’ o ‘falso acusador’. Por lo tanto, comúnmente usamos la palabra ‘diabólico’ para significar ‘diabólico’. Satanás ha intentado repetidamente disminuir la autoridad de Dios atacando a su carácter y hacer que Dios parezca desagradable o injusto.
Por lo tanto, mentir es una gran parte de la estrategia de Satanás para asegurar la adoración a la que se siente con derecho. Ser un acusador falso debe implicar mentir o decir algo falso, y la Biblia verifica esto sobre Satanás en Juan 8:44. En realidad se le llama el padre de las mentiras. Mentir comenzó con él y continúa evitando que la gente conozca y ame a Dios.
Satanás usa adulación y engaño, pero el carácter de Dios se opone a tales tácticas. De él, solo encontraremos justicia y verdad. Hay amor en el juicio de Dios, así como hay justicia en su amor. Combinados, tenemos una roca sobre la cual podemos construir nuestro propio personaje. Cualquier cosa que escuchemos sobre Dios que no coincida con su carácter de amor y justicia, sabemos que es una mentira.
