Sikberto R. Marks Lección 08 – Con los ricos y famosos – sabado 22 de febrero 2014

Con los ricos y famosos

 

Introducción del sábado de tarde

Examinemos lo que el versículo de memoria dice: la raíz de todos los males es “el amor al dinero” y no el dinero en sí. Ser rico es bueno, lo que  es malo es amar la riqueza. Enriquecer también es bueno, sin embargo, correr desesperadamente detrás del dinero empobrece espiritualmente. El amor al dinero induce a cambiar a DIOS por las riquezas.

El dinero llega fácilmente acompañado de problemas. Puede que sea la fama, el poder, el prestigio, los falsos amigos, los delincuentes, el impuesto a la renta, los demás impuestos, y mucho más. ¡Ay de quien se enriquece y no sabe ser rico! Conozco varias historias de gente que se enriqueció de un momento a otro y no le fue bien. “Después de recibir una cantidad fabulosa de dinero [proveniente del mucho oro que encontró en la mina de Sierra Pelada, Pará, Brasil], Indio o José dos Santos, compró una docena de automóviles de una sola vez, luego contrató un avión de la fracasada empresa Transbrasil para encontrarse con una enamorada en Rio de Janeiro y pasó dos meses hospedado en el hotel de lujo Copacabana Palace. Hoy, vive de una jubilación de R$515,00 de su actual esposa, la 14ª. Sucedió una cosa muy parecida con José Sobrinho, quien derrochó los millones que ganó promoviendo fiestas en donde no faltaban bebidas importadas y mujeres bonitas, y actualmente con 70 años, trabaja como empleado de una Cooperativa para poder pagar sus cuentas” (http://www.emporto.com.br/index/noticia-aberta/id/3513). No supieron ser ricos, el humo se les subió a la cabeza.

¿Se acuerdan de otros casos de personas que no supieron ser ricas? Existen las que lo derrochan todo y las que se hacen arrogantes, prepotentes y orgullosas. Existen las que se separan de su esposa legítima y buscan otras. ¿Se acuerdan del caso de Marcos Kitano Matsunaga, que fue asesinado por Elize Matsunaga, su segunda esposa, a quien también ya estaba dejando? Un hombre tan rico, pero que lamentablemente no podía formar un hogar estable. Rico e incompetente en el amor. La mayoría de esas personas no son competentes para ser ricos. Cometen algún error grave, y se apartan más y más de la posibilidad de seguir a JESÚS y obtener la vida eterna. JESÚS quiere protegernos de las trampas de la riqueza, pues muchas personas pierden la vida eterna cuando enriquecen.

            El dinero simboliza lo que la mayoría de estas personas desean más: el poder, la fama, el prestigio, el éxito, el destacarse en la sociedad y el tener muchos amigos. De aquí vienen los abundantes festines de bebidas alcohólicas y en los últimos tiempos, también la droga.

Parece que aquellos que pueden demostrar un símbolo de éxito o la riqueza, necesita mostrar, aparecer, idolatrar el “yo”. Recuerdo que hace mucho tiempo, hoy en día la costumbre ya cambió, algunos, cuando compraban un coche nuevo, lo estacionaban el sábado por la mañana cerca o justo frente a la puerta de la iglesia. Así otros podían ver la adquisición. Muchos, tan tontos y sin cerebro como quién hacía así, observaban atentamente y lo alababan, masajeando su ego. A tal punto llegó la situación que una vez hubo un debate entre los miembros de la plataforma, antes del comienzo del culto divino, sobre cuál era el mejor auto. La riqueza no es un problema, pero puede crear muchos problemas, dependiendo de las personas. Así que tal vez sea bueno orar para que Dios no nos dé ni riqueza ni pobreza, sino lo necesario para una vida digna y segura. En nuestras vidas que se haga la voluntad de Dios; no confiemos tanto en nosotros mismos. Son estos problemas los que Dios quiere que evitemos.

 

Domingo: Ricamente bendecidos

¿Qué pasaría si JESÚS se encontrase con Bill Gates, el dueño de Microsoft, uno de los hombres más ricos del mundo, y le dijese que debería vender todo lo que tiene para dárselo a los pobres? El joven rico de la Biblia se fue triste (sobre eso estudiaremos mejor en la parte del jueves). Observe lo que Bill Gates ya hizo sin que JESÚS se lo pida: “¡El multimillonario Bill Gates, creador y dueño de Microsoft, que donó el 95% de su fortuna, viajará por el mundo, convenciendo a otros millonarios para que también donen sus fortunas! Bill, como es más conocido, y que además de ser un nombre más familiar, llena nuestro sentido de palabras como poder y tecnología, está con las maletas listas para enfrentar una maratón diferente y filantrópica: convencer a otros acaudalados como él, ahora fuera de los EUA, para hacer como él hizo y donar buena parte de sus fortunas para la filantropía. (http://jornalportalsul.com.br/bill-gates-doou-quase-toda-a-sua-fortuna/). Bien, ¿sabe lo que JESÚS le diría a Bill Gates si lo encontrase? Tal vez le hablaría como a Nicodemo, le diría que debe nacer de nuevo, pero que no necesita vender su fortuna para dárselo a los pobres. Ese hombre pudiente no se apegó a la riqueza.

Ser rico no es pecado y no es ni mucho menos una condena a perder la vida eterna. El gran problema ocurre cuando la riqueza se sube a la cabeza y la persona pasa a idolatrarla, de modo que la ama y confía en ella más que en DIOS.

Lo mismo les puede ocurrir a los pobres. Muchos de ellos apuestan en las loterías todas las semanas, porque desean ser ricos. Incluso es gracioso cuando los reporteros les preguntan lo que harían si ganasen. Casi todos viajarían, comprarían cosas, vivirían como millonarios, etc. Los pobres en general no saben ser ricos, y cuando ganan una fortuna, muchos de ellos desperdician todo. Algún tiempo atrás la Tv Globo hizo un reportaje sobre diez personas que ganaron grandes sumas de dinero en la lotería. Solo dos de ellos estaban bien, los demás lo derrocharon todo y algunos inclusive estaban en peores condiciones que antes. Me viene a la mente el caso de un señor que ganó un buen dinero en la lotería y que construyó un hotel en una isla del rio Ijuí, sin darse cuenta de que de cuando en cuando ocurrían inundaciones. Cierto día el rio desbordó y se lo llevó todo.

¿Entendió lo que quiero decir con estos ejemplos? Que muchas veces es preferible ser pobre a arruinarse la vida. Y lo que es peor, a perderla para siempre porque se apegó uno a las riquezas de tal manera que solo piensa y vive para ellas.

Algunos personajes bíblicos fueron ricos. Por ejemplo, Abraham, Isaac, Jacob, Job (rico dos veces), Salomón (ofuscado bastante por la riqueza, pero que al final de su vida se encontró con DIOS) y otros. Tomemos el ejemplo de Abraham. Él era muy rico, pero le dio la preferencia a su sobrino Lot de escoger en dónde quería apacentar sus rebaños.

Ser rico puede ser una bendición si la persona es humilde, solícita, y reconoce que todo viene de DIOS. Actualmente algunas personas ricas de la iglesia hacen gran diferencia en el financiamiento de la predicación del evangelio. Fue así con JESÚS – muy pobre él, pero mujeres ricas lo amparaban en sus necesidades.

Una cosa es cierta: independientemente de si fueron ricos o pobres aquí en la Tierra, todos los salvos en la Tierra Nueva serán ricos de una forma extraordinaria. Allá no habrá Notarías y nadie registrará nada en su nombre. Por eso, en el sentido de posesiones, seremos más pobres que los pobres de la Tierra hoy. Sin embargo, allá tendremos el derecho de disfrutar de todo lo que esté disponible, de modo que viviremos muchas veces mejor que los más ricos de la Tierra. ¿No es extraordinario?

 

Lunes: Encuentro nocturno

            Nicodemo era rico y sincero. Por encima de la riqueza, quería ser salvo. Amaba a DIOS más que al dinero. Sin embargo, había experimentado el gusto por la vida que la riqueza proporciona, y eso lo perjudicaba. Sentía vergüenza de hablar con CRISTO, pues la gente de su clase no hacía eso, no dependía de CRISTO. Cuando ellos iban a hablar con el Maestro, siempre lo hacían con la intención de vencerlo en alguna intriga y nunca para ser aconsejados. Pero Nicodemo sentía la necesidad de tener un encuentro más personal, de orientación y consejo.

Se aproximó de CRISTO en la oscuridad de la noche. Siempre que vayamos a CRISTO, no importa la hora y el lugar. Y como hace toda persona de prestigio, primero le hizo un elogio pensando en ganárselo para su lado. Quería ser aceptado por CRISTO, entonces de acuerdo a la costumbre de la época, procuró agradar al Maestro. ¿Qué es lo que dijo Nicodemo? “Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él” (Juan 3:2). Ese es un elogio interesado. Personalmente detesto cuando alguien llega aquí en casa y elogia artificialmente el césped, los árboles, etc. para después intentar vender algo. Lo que es más, no me gusta cualquier tipo de elogio. Parece que a JESÚS tampoco le gustaba, pues la respuesta fue directa y fulminante: “De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios” (Juan 3:3). Esa respuesta dejó perplejo a Nicodemo que en un primer momento ni entendió, pensando que debería volver al vientre de su madre. JESÚS le dijo: “De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios” (Juan 3:5). ¿Nacido del Espíritu? JESÚS explicó: “Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es” (Juan 3:6). “El nacimiento del Espíritu consiste en una trasformación espiritual radical (vea Romanos 6). El acto físico del bautismo, en sí, no garantiza la entrada en el reino. Al bautismo en las aguas, debe juntarse una trasformación espiritual, o sea, el renacimiento del interior”.

Es interesante notar que JESÚS no le dijo que vendiese todos sus bienes y que el producto lo diese a los pobres. El problema de Nicodemo no era el apego a las riquezas sino a los privilegios de su condición social, de la cual estaba pensando libertarse. Su visita al Maestro, aunque vergonzosa, fue sincera, él quería de hecho hacer los cambios que JESÚS le pidiese. Y el Maestro le pidió la transformación por el bautismo, solo eso. Y los cambios ocurrieron poco después. Vea lo que Ellen G. White dice al respecto de Nicodemo, sobre cómo ese hombre se involucró en el ministerio de CRISTO.

“Por un tiempo, Nicodemo no reconoció públicamente a Cristo, pero estudió su vida y meditó sus enseñanzas. En los concilios del Sanedrín, estorbó repetidas veces los planes que los sacerdotes hacían para destruirle…

“Después de la ascensión del Señor, cuando los discípulos fueron dispersados por la persecución, Nicodemo se adelantó osadamente. Dedicó sus riquezas a sostener la tierna iglesia que los judíos esperaban ver desaparecer a la muerte de Cristo. En tiempos de peligro, el que había sido tan cauteloso y lleno de dudas, se manifestó tan firme como una roca, estimulando la fe de los discípulos y proporcionándoles recursos con que llevar adelante la obra del Evangelio. Aquellos que en otro tiempo le habían tributado reverencia, le despreciaron y persiguieron. Quedó pobre en los bienes de este mundo, pero no le faltó la fe que había tenido su comienzo en aquella conferencia nocturna con Jesús” (El Deseado de Todas las Gentes, 148).

 

Martes: Ricos e infames

¿A quién le agrada pagar impuestos? Más aún cuando son exorbitantes y no se nota el resultado de su aplicación en beneficio público. Lo que más se ve son noticias sobre corrupción entre personas que administran los recursos públicos. Brasil, por ejemplo, que es uno de los países que más cobra impuestos, tiene una de las tasas más altas, es uno de los países más corruptos y en donde hay más evasión de impuestos, en donde faltan cárceles que recuperen a los delincuentes en lugar de ser escuelas de maldad, en donde la salud y la seguridad pública de las grandes ciudades es un desastre tanto por la pésima atención como por la proliferación de la delincuencia, en donde la infraestructura de un modo general deja tanto que desear. ¿Cómo a alguien le agradaría pagar sus impuestos en esas condiciones?

En Europa hay países con tasas de impuestos incluso más altas que las del Brasil, sin embargo, las ciudades son limpias, la salud y la educación son ejemplares, y en relación a la seguridad se puede vivir despreocupadamente. Pagar impuestos por esos lugares es diferente, es compensador, pues hay un retorno.

Ahora piense en cómo era pagar impuestos en los tiempos de JESÚS. Se pagaba para un imperio explotador, el cual de hecho hacía algunas obras, pero se llevaba gran parte del dinero para fuera, para la sede del imperio. Otra parte del dinero era desviada para los cobradores, que para colmo eran judíos, vivían muy bien financieramente de la profesión de cobradores de impuestos y eran fieles al poder imperial, se enriquecían al mismo tiempo que robaban al pueblo cobrando de más y quedándose con la diferencia, y eran amigos de los poderosos que dominaban la región. Los judíos odiaban a esos publicanos, pero JESÚS quería salvar incluso a ellos, y salvó por lo menos a dos: Mateo y Zaqueo.

Pensemos honestamente: no sería nada aconsejable que un buen adventista se reúna para almorzar con el ex juez Nicolau, aquél que malversó 170 millones de reales de la construcción del Tribunal Regional del Trabajo de São Paulo, Brasil, ¿no es verdad? ¿Qué prestigio le sobraría a aquel hermano después de una reunión de esas? Pues bien, ¡JESÚS participó de una comida en la casa de Zaqueo, un mal elemento de la sociedad judía! Los judíos, principalmente los líderes, abominaban eso, pues odiaban a esos explotadores. Pero dos de esos considerados como malos elementos, fueron conquistados para el lado del bien, y uno de ellos hasta se volvió uno de los apóstoles de JESÚS. Esas personas no son desechables, pues puede ocurrir que en lo íntimo de su vida exista alguna posibilidad de cambio radical y en donde el ESPÍRITU SANTO pueda operar.

“Es difícil atribuir la culpa del hecho de que los publicanos también eran ladrones. Las enseñanzas de Moisés y de los profetas eran profanadas. Los principales sacerdotes eran corruptos y homicidas. Los ciegos y cojos eran dejados a su propia suerte. El cuidado de los huérfanos y de las viudas era dejado. El pueblo era manipulado por el sinedrio. La hipocresía se apoderaba de la nación. Así, Zaqueo también se corrompió pensando en la riqueza y en el lujo. Se alió a Roma tornándose un publicano.” Pero una de las características del arrepentimiento es la mudanza radical de actitud. Lo que es más, si no hay una mudanza es porque no hubo ni arrepentimiento ni conversión. Zaqueo cambió de un momento a otro: “Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado” (Lucas 19:8-9).

¿Puede criticarse como algo equivocado aquella comida de JESÚS en la casa de Zaqueo?

 

Miércoles: Mensaje enchapado en oro

El ambiente en que vivimos desarrolla una cultura de valorización de las posesiones materiales. Desde hace ya mucho tiempo que se llegó al punto de que poseer bienes es símbolo de status, éxito, poder, importancia y fama. Los periódicos y la televisión exaltan a quien tiene mucho. Se hace cada vez más difícil cultivar el desapego a los bienes, así como se hace difícil no confiar en ellos y confiar en DIOS. Está cada vez más complicado tener fe en nuestro Salvador y no apegarse a las cosas, porque ellas son cada vez más importantes en la sociedad. Necesitamos de dinero para casi todo y deseamos tener cada vez más para estar seguros o para destacar en la sociedad. Los símbolos de poder son valorizados de tal manera que las personas necesitan tenerlos. Entre los principales símbolos están: los automóviles de lujo, de preferencia importados; las ropas de marcas famosas; ostentación en la casa y exaltación del propio cuerpo.

Todo aquello no es nada más que un engaño de los últimos tiempos, lo cual genera una angustia en las personas que en el afán de tener cada vez más, se quedan ansiosas y agitadas. Pero JESÚS dijo personalmente: “…No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? …Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal” (Mateo 6:25-34).

            Bill Gates, citado frecuentemente como el hombre más rico del mundo, parece no ser tan apegado a los bienes. Vea lo que dijo sobre las riquezas: “No me gustaría ser el hombre más rico del mundo, pues nada de bueno viene de allí” (Bill Gates, palestra en Seattle, EUA, 2006). También dijo: “El dinero no tiene utilidad a partir de un cierto punto, que es cuando solo sirve para crear una organización y obtener recursos para los más pobres”. “Si pasásemos las primeras décadas del siglo 21 atendiendo a los menos favorecidos, encontraríamos un modelo para reducir la pobreza”. El hombre más rico del mundo se tornó un gran filántropo y lo que él y algunos otros hacen aún es poco, pues la pobreza en el mundo solo viene aumentando. Sin embargo, por lo menos ellos ayudan a algunos.

Repetimos, ser rico no es pecado, es en cambio una situación favorable. Pero apegarse a las riquezas, eso sí es un problema de alto riesgo para la vida eterna. Vea un trecho seleccionado de la Biblia sobre esta situación: “¡Vamos ahora, ricos! Llorad y aullad por las miserias que os vendrán. Vuestras riquezas están podridas…. Habéis acumulado tesoros para los días postreros….Habéis vivido en deleites sobre la tierra, y sido disolutos; habéis engordado vuestros corazones como en día de matanza. Habéis condenado y dado muerte al justo, y él no os hace resistencia. Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor….” (Santiago 5:1-7).

            Si alguien que esté leyendo este comentario se encuadra en la clase de los ricos, ¡felicitaciones!, pero siga las recomendaciones de Bill Gates. Así como ese hombre viajó alrededor del mundo persuadiendo a los ricos a ser filántropos, de la misma forma, es necesario que sea advertido sobre la verdad bíblica acerca de la vida eterna, pues parece que este señor tiene un corazón propicio. Asimismo, quien es rico, tenga una vida de mucha oración para que también sea humilde y no se deje dominar por el poder que la riqueza produce. Y los que no somos ricos, no codiciemos las riquezas y vivamos con lo que DIOS nos concedió

 

Jueves: Situaciones de peligro

¿Y al fin de cuentas, debe o no debe un rico vender sus bienes, como JESÚS se lo pidió al joven rico? Como ya observamos, al rico Nicodemo JESÚS no le dijo que vendiese todo lo que tenía para seguirlo, sino que se bautice y sea transformado por el ESPÍRITU SANTO. De hecho, ese fariseo se entregó a JESÚS y le fue más fiel que a la riqueza. Es por eso que no necesitaba venderlo todo como el joven rico. La cuestión no es vender o no vender, sino desprenderse de algún dios de este mundo que nos domina. Eso es lo más importante, pues ese dios impide que sigamos al DIOS verdadero. O la persona es avarienta y no sirve a DIOS, o es lo contrario, ya que nunca se puede servir a esos dos señores.

En el Brasil, tenemos a Eike Fuhrken Batista, al que podríamos llamar el ´joven rico moderno´. En poco tiempo hizo una fortuna que llegó a los 30 mil millones de dólares al inicio de 2012. Orgulloso y ambicioso, dijo que en pocos años sería el hombre más rico del mundo. Eso lo decía abiertamente, en la televisión, como si fuese un niño mimado. Al año siguiente su fortuna cayó hasta cerca de mil millones de dólares. Veamos lo que dice la Revista Exame sobre su caída.

Eike Batista ya fue el séptimo hombre más rico del mundo, con un patrimonio calculado en 30 mil millones de dólares, según el ranking de Forbes. Después de dejar la lista de los multimillonarios en este año [2013], el empresario brasileño ahora se destaca en otra estadística de la revista americana: aparece como el séptimo entre las personalidades con las carreras más desastrosas del 2013…. En esta semana, el ex multimillonario protagonizó otro episodio que confirmó su mala racha: su nombre fue incluido en la lista de insolventes debido a una deuda de 840 reales. A Eike solo le queda suplicar que 2013 termine lo más rápido posible.” (Revista Exame de 19/12/2013). ¡De séptimo más rico del mundo a séptimo colocado en la carrera más desastrosa! ¿Si lo encontrase, qué es lo que le diría JESÚS a ese hombre que ambicionaba el puesto del más rico de todos? Si le pidiese que vendiese todo, ¿qué piensa Ud. que haría Eike? Pues les pregunto: ¿una persona así, es un caso perdido para la salvación? ¿Qué les parece? (Es algo que puede ser discutido en la clase) ¿Cómo comparar a Eike Batista con Bill Gates? ¿Y cómo comparar a esos dos con el joven rico y con Nicodemo?

Existen también los ricos súbitos, aquellos que ganan una fortuna en poco tiempo. Estos se encuentran en alto riesgo, porque difícilmente aprenden a ser ricos sin idolatrar lo que poseen, al mismo tiempo que se enriquecen. Son, por ejemplo, los jugadores de fútbol, los artistas, los cantantes, los ganadores de loterías, los herederos afortunados, etc. Tuvieron una subida rápida hacia la riqueza, pero, como dijimos, no saben ser ricos, y se pierden en la travesía. Ese fue el caso del arquero Bruno[1] que arruinó su vida y la de otros, pensando que lo podía todo. Este tipo de rico generalmente se rodea de personas impropias. La vida de un rico que quiere continuar siendo candidato a la salvación es muy difícil y peligrosa, pues para él existen mucho más atractivos del mundo que para las personas menos afortunadas. Pero, como lo da a entender la lección, son personas que necesitan tener la oportunidad de la salvación.

 

Aplicación del estudio Viernes, día de preparación para el santo sábado.

a)      Síntesis de los principales puntos de la lección

i)   ¿Cuál es el asunto principal?

Los ricos confían en sí y en las riquezas más fácilmente que los pobres. Y ese es el gran problema: en quién (o qué) la persona confía. Las personas son ricas porque tienen el talento de la administración y saben cómo ganar dinero, en cambio la mayoría de los pobres son así porque no descubrieron cómo ganar dinero. Y si alguien que no tiene esa capacidad, enriquece, puede volver a empobrecerse, pues no sabe cómo seguir siendo rico. Es una cuestión de talento, y lo que es más, consciencia de la dependencia de DIOS, que es lo que les falta a muchos ricos, y que muchas veces sobreabunda en los pobres, quienes más fácilmente confían en un Salvador. De cualquier forma, JESÚS murió tanto por los ricos como por los pobres, y a nosotros nos corresponde tener estrategias para alcanzar a todos.

ii) ¿Cuáles son los tópicos relevantes?

No es la riqueza lo que se vuelve un obstáculo para la salvación, sino el apego a la riqueza, que la hace un ídolo por el que la persona deja todo. De esa forma, o ella coloca a DIOS en segundo o tercer lugar, o ni siquiera se acuerda más de Él.

iii)         ¿Usted descubrió otros puntos para agregar?

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b)      ¿Qué cosas importantes podemos aprender de esta lección?

Que la mayoría de los ricos está en una situación lamentable con relación a la salvación, y que nosotros, el pueblo de DIOS, tenemos muchas estrategias para los pobres y muy pocas para los ricos. Sin embargo, debemos entender también que la iglesia no depende del dinero de los ricos, sino de la fe en DIOS.

 

¿Qué aspectos puedo agregar a partir de mi estudio?

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c)      ¿Qué medidas debemos tomar a partir de este estudio?

Por lo menos, amar y orar por los ricos, y como iglesia, elaborar estrategias para ellos. Una estrategia que ya existe son las transmisiones de la Tv Nuevo Tiempo, aunque aún faltan mejores prédicas para alcanzar a los adinerados indiferentes

 

¿Qué es lo bueno de mi vida que me propongo a reforzar y lo malo a cambiar?

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d)     Comentario de EGW

“La invitación evangélica debe ser dada a los ricos y a los pobres, a los importantes y a los menesterosos y se deben proyectar formas para llevar la verdad a nuevos lugares y a toda clase de gente… Cristo predicó el Evangelio a los pobres, pero él no limitó su obra a esa clase de personas. Trabajó por todos los que podían oír su palabra: no solamente los publicanos y los desheredados, sino el rico y refinado fariseo, el noble judío, el centurión y el gobernante romano. Esa es la clase de trabajo que siempre he visto que debe ser hecho. No debemos fortalecer cada tendón y nervio espiritual para trabajar por las clases más bajas, y hacer de este trabajo el fin y propósito de todos. Hay otros que debemos traer hasta el Maestro, almas que necesitan la verdad, que llevan responsabilidades y que trabajarán con todas sus facultades santificadas tanto por los poderosos como por los desheredados” (El Ministerio de la Bondad, 269-270).

e)      Conclusión general

La proporción de los que aceptan a JESÚS es mayor entre la clase pobre, sin embargo, entre los ricos también hay personas que se vuelven dependientes del Salvador. Debemos encontrar a esas personas, con el poder del ESPÍRITU SANTO. Eso requiere mucha oración, y esfuerzo bien planificado, pues quien es rico no es iluso.

No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan” (Mateo 6:19-20).

 

¿Cuál es el punto más relevante al que llegué mediante este estudio?

El comentario en video tiene énfasis evangelizadora.

sikberto renaldo marksAutor: Sikberto R Marks

Estudiado y escrito entre el 10 y el 16/01/2014
Revisado el 17/01/2014
Corregido por Jair Bezerra
Traducido por Mario Dávila / mdavila@ufsj.edu.br

Radio Adventista
1 comment… add one
  • Gracias por esas lecciones tan bonitas. Tiene usted comentario en video? Donde lo puedo conseguir.

    Dios los bendiga.

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