Manasés a diferencia de su padre Ezequías era un mal rey pero al final de su vida terminó arrepintiéndose. Por lo menos durante 12 años Manasés ha actuado deliberadamente contra Dios desafiando en su liderazgo, él era un rebelde y se había revelado contra Dios, tenía una actitud muy provocadora, como diciendo que “Dios será condenado, yo hago lo que quiero” en libro de 2 de crónicas 33. 6 dice que practicó el mal, y continúa en ese mal camino con la intensión de molestar a Dios, hizo una colección de mal como: el amor de la estrella, el sol y la luna, llegó a construir altares paganos en el templo del señor, quemaron sus hijos como sacrificios paganos, fue brujo se trataba de los médiums y magos, llegaron a hacer peores que aquellas personas que Dios expulsó al instalar a los israelitas en Canaán.
Pero al final Manasés se humilló y oró a Dios de todo corazón se arrepintió. Dios escuchó sus suplicas y obtuvo su libertad volvió a ser rey. Y luego hizo reformas en Judá destruyendo todos los altares paganos y restauró la adoración verdadera.