Lección 6 Edicion Adultos: “De la arrogancia a la destrucción” Para el 8 de febrero de 2020

Primer trimestre (enero-marzo) de 2020

“De la arrogancia a la destrucción”

Lección 6: – Para el 8 de febrero de 2020

 

Sábado 1 de febrero

Lee Para el Estudio de esta Semana: Daniel 5; Apocalipsis 17:4–6; Salmo 96:5; Colosenses 1:15–17; Romanos 1:16–32; Eclesiastés 8:11; Apocalipsis 14:8.

Para Memorizar: “Él muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos” (Dan. 2:21).

En Daniel 5, la Palabra de Dios nos da un ejemplo poderoso de la arrogancia humana que termina de una manera asombrosa y dramática. Aunque se podría decir que a Nabucodonosor le llevó mucho tiempo aprender la lección, al menos la aprendió. Su nieto, Belsasar, no. Al usar los vasos del Templo en una orgía palaciega, Belsasar los profana. Ese acto de profanación equivale no solo a desafiar a Dios sino a atacar a Dios mismo. De este modo, Belsasar llena la copa de sus iniquidades al actuar de forma semejante al cuerno pequeño (ver Dan. 8), que atacó los pilares del Santuario de Dios. Al eliminar el dominio de Belsasar, Dios prefigura lo que logrará contra los enemigos de su pueblo en los últimos días. Los acontecimientos narrados en Daniel 5 tuvieron lugar en 539 a.C., la noche en que Babilonia cayó ante el ejército medopersa. Aquí ocurre la transición del oro a la plata predicha en Daniel 2. Una vez más, resulta evidente que Dios gobierna en los asuntos del mundo.

 

Domingo 2 de febrero:

La fiesta de Belsasar

Lee Daniel 5:1 al 4 junto con Daniel 1:1 y 2. ¿Qué tiene de malo lo que hace Belsasar? Esto que hace, ¿cómo revela su verdadero carácter? Compara sus actos con Apocalipsis 17:4 al 6. ¿Qué paralelismos puedes encontrar?

El rey manda que los utensilios sagrados del Templo de Jerusalén se utilicen como recipientes para bebida. Nabucodonosor se apodera de los vasos del Templo de Jerusalén, pero los coloca en la casa de su dios, lo que demuestra que al menos respeta su estatus sagrado. No obstante, Belsasar convierte los vasos sagrados en utensilios para beber de la manera más profana.

Mientras bebían de los vasos sagrados, los dignatarios de Belsasar “alabaron a los dioses de oro y de plata, de bronce, de hierro, de madera y de piedra” (Dan. 5:4). Cabe señalar que se mencionan seis materiales. Los babilonios usaban el sistema sexagesimal (un sistema basado en el número 60), en contraste con el sistema decimal que utilizamos en la actualidad (basado en el número 10). Así, las seis categorías de dioses representan la totalidad de las deidades babilónicas y, por lo tanto, la plenitud del sistema religioso babilónico.

Curiosamente, el orden de los materiales sigue el orden de los componentes de la estatua del sueño de Nabucodonosor, excepto que la madera reemplaza la arcilla. Como en el sueño, la piedra aparece en último lugar; aunque aquí indica la composición material de los ídolos, la piedra también nos recuerda el juicio de Dios sobre los imperios mundanos (ver Dan. 2:44, 45), simbolizados por Babilonia.

Esta fiesta ofrece una representación adecuada de la Babilonia del tiempo del fin, como aparece en el libro de Apocalipsis. Al igual que Belsasar, la mujer de la Babilonia del tiempo del fin sostiene una copa de oro y ofrece bebida contaminada a las naciones. En otras palabras, mediante falsas doctrinas y un sistema de adoración distorsionado, la Babilonia moderna seduce al mundo hacia el mal (Apoc. 17:4-6), ajena al juicio que pronto caerá sobre ella. Un día el juicio llegará.

¿Cuáles son las formas en que nuestra sociedad y cultura profanan la verdad de la Palabra de Dios? ¿Cómo podemos estar atentos para no formar parte de esa profanación, ni siquiera de manera sutil? Lleva tu respuesta a la clase el sábado.

 

Lunes 3 de febrero:

Un visitante no invitado

Lee Daniel 5:5 al 8. ¿Qué sucede, y por qué el rey responde de ese modo? ¿En qué aspectos el relato es paralelo a Daniel 2, y por qué es importante ese paralelismo? (Ver Sal. 96:5; Col. 1:15–17.)

Al igual que Nabucodonosor en crisis anteriores (Dan. 2:2; Dan. 4:7), Belsasar llama a los astrólogos, los caldeos y los adivinos para dilucidar la escritura misteriosa. Y para asegurarse de que den lo mejor de sí, el rey les promete honores extravagantes: (1) vestimenta púrpura, un color usado por la realeza en la antigüedad (Est. 8:15); (2) una cadena de oro, que era señal de alto estatus social (Gén. 41:42); y (3) el tercer puesto como gobernante del reino. Esta última recompensa refleja con precisión las circunstancias históricas de Babilonia en ese momento. Debido a que Belsasar gobernaba en segundo lugar como corregente con su padre, Nabonido, ofrece el tercer puesto como gobernante. Pero a pesar de las tentadoras recompensas, los sabios, una vez más, no aportan ninguna explicación.

Además de todos sus pecados, el rey intenta hallar sabiduría en el lugar equivocado. Los expertos babilónicos no pueden dilucidar el significado del mensaje. Está escrito en su propio idioma, arameo, como veremos mañana, pero no pueden entender las palabras. Esto podría recordarnos lo que el Señor dice por medio de Isaías: “Porque perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos” (Isa. 29:14). Después de citar este versículo, el apóstol Pablo declara: “¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el disputador de este siglo? ¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo? Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación” (1 Cor. 1:20, 21).

Algunas verdades son demasiado importantes para que la humanidad intente descubrirlas por sí misma. Por eso Dios nos revela estas verdades.

Piensa en cuáles serían las recompensas y, dado lo que estaba a punto de suceder, cuán inútiles realmente eran esas recompensas. ¿Qué debería decirnos esto sobre cuán fugaces pueden ser las cosas del mundo y por qué siempre debemos tener en mente la perspectiva de la eternidad en todo lo que hacemos?

 

Martes 4 de febrero:

Entra la reina

Lee Daniel 5:9 al 12. ¿Qué dice la reina sobre Daniel que el rey ya debería haber sabido? El hecho de que incluso ignorara la existencia de Daniel, ¿qué nos dice de él?

A medida que el salón de banquetes entra en caos debido al misterioso mensaje escrito en la pared, llega la reina y le ofrece una solución al confundido rey. Le recuerda que está Daniel, quien demostró capacidad para interpretar sueños y resolver misterios durante la época de Nabucodonosor. Si Belsasar hubiese sido tan inteligente como su predecesor, habría sabido dónde acudir para encontrar el significado de esta misteriosa escritura. La intervención de la reina resultó necesaria para el rey, que a estas alturas parece totalmente perdido en cuanto a qué hacer a continuación. Las palabras de la reina suenan a reprensión para Belsasar por haber pasado por alto a la única persona del reino que podía interpretar la escritura misteriosa. Y también le da al rey un currículo oral de Daniel: el profeta tiene el Espíritu del Santo Dios, luz, entendimiento y sabiduría divinos, un espíritu excelente, conocimiento; es capaz de comprender e interpretar sueños, resolver acertijos y explicar enigmas; fue jefe de los magos, astrólogos, caldeos y adivinos en la época de Nabucodonosor (Dan. 5:11, 12).
A estas alturas, nuevamente nos preguntamos por qué Belsasar había ignorado a Daniel. El pasaje no ofrece una respuesta directa a esta pregunta, pero suponemos que en ese momento Daniel, después de trabajar para el rey al menos hasta el tercer año de su reinado (Dan. 8:1, 27), ya no estaba en servicio activo. Un factor podría ser la edad de Daniel.

Probablemente tenía unos ochenta años, y es factible que el rey haya querido reemplazar a la antigua dirigencia por una generación más joven. Quizá también decidió ignorar a Daniel porque no quería comprometerse con el Dios de Daniel. Pero cualquiera que sea la razón o la combinación de razones, continúa siendo llamativo que alguien con una trayectoria como la de Daniel pudiera pasar al olvido tan rápidamente.

Lee Romanos 1:16 al 32. ¿De qué maneras vemos que se manifiesta el principio expresado en estos versículos, no solo en esta historia, sino en el mundo actual?

 

Miércoles 5 de febrero:

Pesado y hallado falto

Lee Daniel 5:13 al 28. ¿Cuál es la razón que da Daniel para la pronta caída de este rey?

Forzado por las circunstancias, el rey recurre a consultar a Daniel, pero parece que lo hace con reticencia. Esto quizá revele más sobre la actitud del rey hacia el Dios de Daniel que hacia el mismo Daniel.

A su vez, la respuesta de Daniel al ofrecimiento de recompensa del rey dice mucho sobre las prioridades y el carácter de Daniel. También es probable que Daniel, al conocer el significado de las palabras misteriosas, se dé cuenta de cuán inútil es la recompensa.

Entonces Daniel acusa al rey de tres cargos.

En primer lugar, Belsasar ignoró totalmente la experiencia de Nabucodonosor. De lo contrario, se habría arrepentido y humillado como su antecesor.

En segundo lugar, Belsasar usó los vasos del Templo para beber vino y alabar a sus ídolos. Aquí Daniel menciona los seis tipos de materiales utilizados para hacer ídolos en el mismo orden señalado anteriormente.

En tercer lugar, el rey se olvidó de glorificar “al Dios en cuya mano está tu vida, y cuyos son todos tus caminos, nunca honraste” (Dan. 5:23).

Luego de ocuparse de los errores del rey, Daniel procede a la interpretación. Ahora descubrimos que el grafiti divino consiste en tres verbos arameos (el primero se repite). El rey y sus sabios debieron haber sabido su significado básico: MENE: “contado”; TEKEL: “pesado” y PERES: “dividido”.

Como el ejército medopersa estaba a las puertas de Babilonia, el rey y los sabios debieron haber sospechado algún significado ominoso en esa escritura, pero los sabios no se atrevieron a mencionarle nada desagradable al rey. Solo Daniel demuestra ser capaz de decodificar el verdadero mensaje como una declaración significativa para transmitir su significado completo a Belsasar: “MENE: Contó Dios tu reino, y le ha puesto fin. TEKEL: Pesado has sido en balanza, y fuiste hallado falto. PERES: Tu reino ha sido roto, y dado a los medos y a los persas” (Dan. 5:25-28).

No son precisamente palabras de consuelo y alegría.

El juicio llegó con presteza sobre el rey. ¿Cómo podemos aprender a confiar en Dios cuando, por el momento, la justicia y el juicio aún no han llegado? (Ver Ecl. 3:17; 8:11; Mat. 12:36; Rom. 14:12.)

 

Jueves 6 de febrero:

La caída de Babilonia

Lee Daniel 5:29 al 31 junto con Apocalipsis 14:8; 16:19; y 18:2. ¿Qué podemos aprender sobre la caída de la Babilonia de Belsasar que señala la caída de la Babilonia del tiempo del fin?

Más allá de sus errores, Belsasar es un hombre de palabra. Por eso, a pesar de las malas noticias, queda satisfecho con la interpretación que le dio Daniel, por lo que le otorga al profeta los regalos prometidos. Al parecer, al admitir la verdad del mensaje de Daniel el rey reconoce implícitamente la realidad del Dios de Daniel. Curiosamente, Daniel ahora acepta los regalos que rechazó antes, probablemente porque esos regalos ya no pueden influir en su interpretación. Además, a estas alturas, esos regalos carecen de significado, ya que el imperio está a punto de caer. Por lo tanto, probablemente por cortesía, el profeta acepta las recompensas, sabiendo perfectamente que será el tercer gobernante del reino por unas pocas horas solamente.

Exactamente como lo anunció el profeta, Babilonia cae. Y lo hace rápidamente; mientras el rey y sus cortesanos beben, la ciudad cae sin ninguna batalla. Según el historiador Herodoto, los persas cavaron un canal para desviar el río Éufrates e invadieron la ciudad a través del lecho del río. Esa misma noche Belsasar es asesinado. Su padre, el rey Nabonido, ya había abandonado la ciudad, entregándose más tarde a los nuevos gobernantes. De este modo, el mayor imperio que la humanidad haya conocido hasta ese momento llegó a su fin. Babilonia, la cabeza de oro, ya no existía…

“A Belsasar se le habían dado muchas oportunidades para conocer la voluntad de Dios y ponerla en práctica. Había visto que su abuelo Nabucodonosor fue desterrado de la sociedad de los hombres. Había visto que el intelecto del que se gloriaba el orgulloso monarca le fue arrebatado por Aquel que se lo dio. Había visto que el rey fue expulsado de su reino, y puesto en compañía de las bestias del campo. Pero el amor de Belsasar por la diversión y la autoglorificación borró las lecciones que nunca debería haber olvidado; y cometió pecados similares a los que acarrearon juicios insignes sobre Nabucodonosor. Desaprovechó las oportunidades que se le concedieron misericordiosamente, sin tener en cuenta las oportunidades que tenía a su alcance para familiarizarse con la verdad” (BE, 25 de abril de 1898).

¿Qué oportunidades tenemos para “familiarizarnos con la verdad”? ¿Qué significa eso? ¿En qué momento podemos decir que estamos familiarizados con toda la verdad que necesitamos saber?

 

Viernes 7 de febrero

Para Estudiar y Meditar:

Las grandes fiestas eran comunes en las cortes del mundo antiguo. A los reyes les encantaba hacer fiestas con extravagancia y lujo para mostrar su grandeza y seguridad en sí mismos. Aunque no conocemos todos los detalles de esta fiesta en particular, sabemos que tuvo lugar cuando el ejército medopersa estaba preparado para atacar Babilonia. Pero humanamente hablando, no había razón para preocuparse. Babilonia tenía paredes fortificadas, un suministro de alimentos para muchos años y mucha agua, porque el río Éufrates atravesaba el corazón de la ciudad. Así que, el rey Belsasar no tuvo reparos en hacer una fiesta mientras el enemigo rodeaba la ciudad. Y ordenó una celebración trascendental, que pronto degeneró en una orgía. Qué poderoso testimonio para la arrogancia de la humanidad, especialmente en contraste con el poder del Señor. A través de Daniel, Dios le dice al rey que, a pesar de las oportunidades que tuvo para aprender la verdad, “al Dios en cuya mano está tu vida, y cuyos son todos tus caminos, nunca honraste” (Dan. 5:23).

“La historia de las naciones nos habla a nosotros hoy. Dios asignó a cada nación e individuo un lugar en su gran plan. Hoy los hombres y las naciones son probados por la plomada que está en la mano de aquel que no comete error. Por su propia elección, cada uno decide su destino, y Dios lo rige todo para cumplir sus propósitos” (PR 393).

Preguntas para Dialogar:

  1. En clase, analicen la respuesta a la pregunta del domingo sobre las formas en que la sociedad y la cultura profanan la verdad de Dios. ¿Cuáles son estas formas y cómo deberíamos nosotros, como iglesia e individualmente, responder a esas profanaciones?
  2. ¿Qué nos enseña esta historia? ¿En qué sentido la salvación no tiene que ver tanto con lo que sabemos sino con cómo respondemos a lo que sabemos? (Ver Dan. 5:22.)
  3. Lee Daniel 5:23. ¿Qué principios espirituales importantes se encuentran en este versículo? Por ejemplo, ¿de qué manera el texto nos advierte en contra del desafío de Dios? O ¿qué nos enseña el versículo acerca de Dios no solo como Creador sino también como Sustentador de nuestra existencia?
  4. Aun sin saber qué significan las palabras, Belsasar se asustó (Dan. 5:6). ¿Qué nos dice esto sobre lo que significa vivir con cargo de conciencia?
Radio Adventista
3 comments… add one
  • Favor ayudeme con los puntos claves de la leccion de escuela sabatica de hoy

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    • Yo le recomiendo que vea el vídeo del canal “crecer más” ellos suben el repaso de la lección de una manera muy simple y con puntos claves bien establecidos

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  • Esta incorrecto explicado en escuela sabatica lecion 6 que sabios pueden leer palabras escritos en la pared y no querían interpretar por el miedo al rey.

    En la biblia y libro E.Wait escrito otras cosas. Nadie no puede leer letras escritas en la pared

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