Lección 10 Edicion Adultos: “Estados Unidos y Babilonia” Para el 9 de junio de 2018

Segundo trimestre (abril-junio) de 2018

“Estados Unidos y Babilonia”

Lección 10: – Para el 9 de junio de 2018

 

Sábado 2 de junio

Lee Para el Estudio de esta Semana: Apocalipsis 13:1-12; 14:9-11; 16:2; 19:20; 20:4; Jeremías 51:6, 7, 53, 57; Apocalipsis 18:1-4.

Para Memorizar: “En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos en el libro” (Dan. 12:1).

La semana pasada analizamos “la falsificación de la trinidad”, a Satanás (el dragón) y a dos poderes terrenales que juntos perseguirán al pueblo de Dios.

Una de estas potencias, la bestia que sube del mar (Apoc. 13:1-10), se describe como la combinación de un leopardo, un oso y un león (Apoc. 13:2), imágenes tomadas directamente de Daniel 7:4 al 6. En la lección seis vimos que, en Daniel 7, después del surgimiento de Babilonia (león), Medopersia (oso) y Grecia (leopardo), vino el último poder terrenal: Roma. Comenzó como Roma pagana y luego se convirtió en la Roma papal: el poder del cuerno pequeño de Daniel 7:7 y 8, 19 al 21, y 23 al 25, que salió directamente de la cuarta bestia. Vimos también que muchas de las características de la Roma papal, como se muestra en estos versículos de Daniel 7, reaparecen en la bestia que surge del mar de Apocalipsis 13:1 al 10. Por lo tanto, los eruditos bíblicos consideran que Roma es uno de los antagonistas claves en el escenario del tiempo del fin de Apocalipsis 13.

Sin embargo, Roma no está sola; se describe otra potencia. Esta semana nos centraremos principalmente en Apocalipsis 13, y en los acontecimientos y poderes descriptos allí; y como siempre, nos haremos las siguientes preguntas: ¿Qué significan estos acontecimientos y cómo podemos estar preparados para ellos?

 

Domingo 3 de junio:

La herida mortal sanada

Lee Apocalipsis 13:1 al 10 y analiza por qué se refiere al papado, en su papel en el pasado y en el futuro. Observa específicamente qué rol prominente se le da. ¿Qué significa esto en términos de los acontecimientos de los últimos días?

Aunque Dios tiene personas fieles en todas las iglesias, las Escrituras apuntan a un rol específico que esta institución ha desempeñado en la historia y que jugará en los acontecimientos de los últimos días.

Lee Apocalipsis 13:3. ¿Qué ocurre aquí, y qué nos enseña esto sobre la prominencia de Roma?

Durante siglos, la iglesia romana había sido la religión principal y, en muchos sentidos, el centro político del mundo occidental. Un ejemplo revelador de su poder se ve en la historia del emperador romano Enrique IV quien, habiendo hecho enfadar al papa Gregorio VII, fue hasta el castillo del Papa para hacer las paces. Allí, el emperador romano fue obligado a esperar en un atrio exterior durante tres días en el frío del invierno antes de que el Papa le concediera la entrada. Gregorio VII, eufórico por su triunfo, se jactó de que era su deber derribar el orgullo de los reyes.

Sin embargo, mediante la influencia de la Reforma, la Ilustración y la Revolución Francesa, la hegemonía política y religiosa de Roma quedó hecha añicos a finales del siglo XVIII. Uno de los papas, Pío VI, efectivamente fue llevado cautivo por el ejército francés en 1798 y murió en el exilio en 1799.

No obstante, Apocalipsis 13 habla de un resurgimiento, de la curación de su “herida mortal”. Y aunque Roma hoy no tenga el tipo de poder político que ejercía en la época de Gregorio VII, es gracias a la popularidad de los últimos papas que vuelve a ser una fuerza influyente tanto en el ámbito religioso como en el político (por ej.: el discurso del papa Francisco a ambas cámaras del Congreso estadounidense en 2015 fue una primicia histórica). Según la profecía, esta influencia aumentará.

¿Cómo podemos ser fieles al mensaje que hemos sido llamados a predicar, pero de una manera que ofenda lo menos posible? A su vez, ¿por cuáles razones no debemos doblegarnos a fin de ser “políticamente correctos” al proclamar la verdad presente?

 

Lunes 4 de junio:

Los Estados Unidos en la profecía

La gente se pregunta, y con razón: ¿Cómo podría Roma tener el tipo de influencia hoy, o en el futuro, que se describe en Apocalipsis 13? Después de todo, hace rato que pasó la época en la que podía dirigir ejércitos, como lo hizo en el pasado. Pues la respuesta también se encuentra en Apocalipsis 13.

Lee Apocalipsis 13:11 y 12. ¿Qué símbolos nos ayudan a identificar quién es este poder?

En Apocalipsis 13:5 se menciona que, a la bestia que precede a esta y que desde siempre los protestantes han considerado que es Roma, que se le dio poder por cuarenta y dos meses. Estos cuarenta y dos meses son los “tiempo, y tiempos, y medio tiempo” de Daniel 7:25, o los tres años y medio de Apocalipsis 12:14, o 1.260 días proféticos de Apocalipsis 12:6. Es el tiempo durante el cual el poder papal oprimió a sus oponentes. Este período profético (que utiliza el principio de día por año) comenzó con la supremacía papal en 538 d.C. y terminó en 1798, el año en que el Papa fue llevado cautivo. En este momento, el poder papal recibió su herida mortal, y la predicción se cumplió. Alrededor de esa época de la historia, cerca del final de los “cuarenta y dos meses” (1798), aparece otra potencia (Apoc. 13:1, 11) que surge de la tierra, y que contrasta con muchos de los poderes anteriores que salieron del agua (ver Dan. 7:2, 3), que es un símbolo de las masas humanas. “Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas” (Apoc. 17:15). Por estas y otras razones, este poder debe ser Estados Unidos de Norteamérica, que surgió en una parte relativamente deshabitada del mundo y no tuvo que derrocar a ningún imperio mayor para ello. “¿Cuál era, en 1798, la nación del nuevo mundo cuyo poder estuviera surgiendo, de manera que se perfilara como país fuerte y grande, capaz de llamar la atención del mundo? La aplicación del símbolo no admite dudas. Una nación, y sólo una, satisface las especificaciones de esta profecía; sin lugar a equívocos señala a Estados Unidos de Norteamérica” (CS 435).

Aunque primero se describe a este poder con dos cuernos como de cordero, animal que simboliza la mansedumbre, hablará “como “dragón” (Apoc. 13:11), lo que denota un tiempo de persecución similar al ocurrido bajo el poder anterior. Apocalipsis 13:11 al 17, entonces, responde a la pregunta de cómo podría Roma ejercer la influencia que la profecía predice: simplemente, contará con el respaldo del poder de Estados Unidos.

 

Martes 5 de junio:

Una cuestión de adoración

A lo largo de la historia sagrada, el Señor tuvo que lidiar constantemente con los que caían en la idolatría y otras formas de adoración falsa (ver Mat. 4:8-10). En la crisis final descripta en Apocalipsis 13, volverá a surgir el tema de la adoración. Aquí, también, el pueblo de Dios tendrá que decidir a quién adorará y servirá (ver Jos. 24:15).

En la lección 2, titulada “Daniel y el tiempo del fin”, estudiamos la historia de tres muchachos hebreos a quienes se les ordenó “adorar la estatua de oro” (Dan 3:5). Vimos también que Apocalipsis 13 utiliza el lenguaje de ese capítulo para representar la persecución que el pueblo de Dios enfrentará en los últimos tiempos. Es decir, lo que sucedió en Daniel 3 puede ser visto como un precursor de lo que sucederá en los últimos días, según se muestra en el contexto inmediato de los poderes de la bestia en Apocalipsis 13. A todos se les ordenó adorar la estatua de oro, o serían ejecutados en un horno ardiente. De igual modo, en Apocalipsis 13, “todo el que no la adorase [a la imagen de la bestia]” sería ejecutado (Apoc. 13:15).

Lee Apocalipsis 14:9 al 11; 16:2; 19:20; y 20:4. ¿Qué nos dicen estos versículos sobre cuan trascendental será el tema de la adoración?

Babilonia siempre ha sido la capital de la adoración falsa. La Torre de Babel dio prueba de los deseos de sus constructores, al igual que Lucifer, de subir “sobre las alturas de las nubes” y de ser “semejante al Altísimo” (Isa. 14:14), como así también de sus esfuerzos por salvarse a sí mismos en caso de otro diluvio mundial. Por lo tanto, se negaban a creer en la promesa de Dios de que nunca permitiría que se desatase otro diluvio sobre la Tierra (Gén. 9:8-11).

El Imperio Neobabilónico también exaltaba la obra de las manos humanas. Nabucodonosor exaltó “la gran Babilonia que yo edifiqué” (Dan. 4:30). Más adelante, el rey Belsasar tomó las copas de oro del Templo de Salomón para un banquete, y “bebieron vino, y alabaron a los dioses de oro y de plata, de bronce, de hierro, de madera y de piedra” (Dan 5:3). Observa que los verdaderos vasos del Templo estaban llenos de vino embriagador que reducía la sensibilidad de todos los que bebían de ellos. Como resultado, muchos de la ciudad perecieron cuando cayó Babilonia. Una apariencia externa de verdad puede engañarnos pues enmascara el mortal “vino de Babilonia”. La adoración falsa y las ideas falsas son la divisa del reino de Satanás.

¿De qué modo podemos asegurarnos de que no estamos participando hoy de ninguna adoración falsa?

 

Miércoles 6 de junio:

“Babilonia la grande”

Lee Jeremías 51:6, 7, 53 y 57; Zacarías 2:7; y Apocalipsis 17:5 y 6; y 18:2 y 3. ¿Qué nos enseñan estos versículos sobre Babilonia?

Tal como vimos ayer, Babilonia tiene una larga historia como capital de la adoración falsa. Por lo tanto, es un símbolo apropiado de un poder del tiempo del fin que engaña a las naciones.

Compara el dragón, la bestia que sube del mar y la bestia escarlata (Apoc. 12:3; 13:1-3; 17:3). ¿Cuáles son las similitudes y las diferencias?

Las tres bestias tienen siete cabezas y diez cuernos, que representan la suma total de cabezas y cuernos de las bestias de Daniel 7. Cada imperio sucesivo se construyó sobre los que vinieron antes. Del mismo modo, la bestia escarlata combina elementos del dragón y la bestia que sube del mar (que simbolizan la Roma pagana y papal, respectivamente), así como de la bestia que sube de la tierra (Apoc. 13:11-14), agrupando “a los tres poderes –a todos los enemigos de Dios– en una verdadera coalición”.–J. B. Doukhan, Secretos del Apocalipsis: El Apocalipsis visto a través de ojos hebreos, p. 175.

Un elemento adicional de Apocalipsis 17 es la mujer montada sobre la bestia escarlata, que simboliza una unión ilícita de poderes religiosos y políticos. Esta mujer contrasta fuertemente con la mujer pura de Apocalipsis 12:

Mujer pura (Apoc. 12) En el cielo
Vestida del sol Corona de doce estrellas
Atacada por el dragón Madre del remanente
Ramera (Apoc. 17) Sobre muchas aguas
Vestida de púrpura y escarlata Adornada con oro, piedras preciosas, perlas
Sustentada por el dragón Madre de las rameras

Como “la madre de las rameras”, Babilonia ha estado muy ocupada reproduciéndose. La iglesia madre apóstata tiene muchas hijas apóstatas. Pero Dios no asume la responsabilidad de los errores promulgados ni de las atrocidades cometidas por el cristianismo apóstata. Su pueblo verdadero, aunque atacado por Satanás, sobrevive a través de los siglos.

Apocalipsis 14:8 ya le advirtió a la gente sobre la caída de Babilonia o la apostasía de la verdad, que posteriormente conduce al engaño final que genera la marca de la bestia (Apoc. 14:9-11). Esta advertencia se repetirá con mucho más poder, y culminará en un último llamado para que el pueblo de Dios que todavía esté en Babilonia salga de ella y se una a la iglesia remanente de Dios del tiempo del fin (Apoc. 18:1-4).

 

Jueves 7 de junio:

Salid de ella, pueblo mío

A lo largo de los años, los estudiosos de la profecía bíblica han estado siguiendo los acontecimientos mundiales con gran interés, especialmente aquellos que parecen relacionarse con el tiempo del fin. Pensemos, por ejemplo, en el papel de Estados Unidos. Ya en 1851, algunos adventistas identificaban a Estados Unidos con el poder de la segunda bestia (Apoc. 13:11-15), una identificación muy notable dada la condición de Estados Unidos en ese entonces. A mediados del siglo XIX, las grandes potencias seguían siendo las del Viejo Mundo: Prusia, Francia, Austria-Hungría e Inglaterra. En ese entonces, Estados Unidos tenía un ejército pacífico de unos veinte mil hombres, aproximadamente una décima parte de la cantidad de combatientes de la Batalla de Waterloo (1815) solamente. En 1814, apenas cuarenta años antes, los británicos invadieron e incendiaron Washington, D.C. En 1867, los valientes de Sitting Bull aniquilaron el séptimo regimiento de caballería de Estados Unidos del general Custer. Por consiguiente, incluso después de que algunos comentaristas identificaran a Estados Unidos como el poder que un día impondría la “marca de la bestia” en el mundo, la nación todavía estaba luchando contra los nativos norteamericanos en su propio terreno, ¡y no siempre ganaban tampoco! No caben dudas de que los acontecimientos mundiales se desarrollan como creímos. Pero, todavía falta que ocurran más cosas antes de que llegue el fin. Por eso es muy importante, por ejemplo, al hablar de la “marca de la bestia”, enfatizar que, en este momento, no la tiene nadie, independientemente de si guardan el cuarto Mandamiento o no.

Además, deben suceder otras cosas.

Lee Apocalipsis 18:1 al 4. ¿Qué ocurre aquí, y por qué es importante que lo recordemos ahora? ¿Qué nos enseñan estos versículos acerca de nuestra misión hacia el mundo?

Estos versículos pintan una sombría imagen del mundo político, moral y espiritual. Muestran la influencia malévola de la falsa enseñanza religiosa en el mundo. Sin embargo, al mismo tiempo, ofrecen una gran esperanza porque otro ángel del cielo ilumina el mundo con su gloria. Además, los fieles de Dios, los que aún no saben lo que deben saber, son llamados a salir de Babilonia. Esto significa, entonces, que el pueblo de Dios que ya está afuera de Babilonia tiene, hasta el final, una obra que hacer por quienes todavía están en ella.

¿Qué debiera significar para nosotros que el Señor llame “mi pueblo” a algunos de los que todavía están en Babilonia? ¿Por qué es importante recordar este aspecto cuando nos relacionamos con los demás?

 

Viernes 8 de junio

Para Estudiar y Meditar:

El ataque de Satanás a la Ley de Dios es un ataque contra Dios mismo: contra su autoridad y gobierno. Por ende, en los últimos días, en los acontecimientos culminantes de la crisis final, Satanás atacará a los que guardan “los mandamientos de Dios” (Apoc. 12:17, 14:12) porque solamente ellos, en toda la Tierra, se negarán a rendirle homenaje a través de sus representantes terrenales. La batalla que inició contra Dios en el cielo hace mucho tiempo continuará aquí en la Tierra, y así como fue derrotado en el cielo también será derrotado aquí en la Tierra. “Desde el origen de la gran controversia en el cielo, el propósito de Satanás ha sido destruir la Ley de Dios. Para realizarlo comenzó su rebelión contra el Creador y, aunque fue expulsado del cielo, continuó la misma guerra en la Tierra. Engañar a los hombres y así inducirlos a transgredir la Ley de Dios, tal fue el objetivo que persiguió sin cejar. Sea esto conseguido haciendo a un lado toda la Ley o descuidando uno de sus preceptos, el resultado será finalmente el mismo. El que peca ‘en un punto’ manifiesta menosprecio por toda la Ley; su influencia y su ejemplo están del lado de la transgresión; y viene a ser ‘culpable de todos’ (Sant. 2:10)” (CS 569).

Preguntas para Dialogar:

  1. Conversen en clase acerca de los acontecimientos mundiales y en qué sentido apuntan a lo que creemos que debe suceder en los últimos días. ¿Qué acontecimientos todavía falta que sucedan? ¿Cómo podemos aprender a mantenernos atentos a la señales de los tiempos y, a la vez, evitar el fanatismo, poner fechas y hacer predicciones audaces sobre cosas que la Biblia y los escritos de Elena de White no han enseñado explícitamente?
  2. Reflexiona sobre el tema de la adoración. ¿Qué significa adorar algo? ¿De qué modo adoramos lo que adoramos?
  3. Reflexiona sobre la idea de que Dios todavía tiene gente en Babilonia. ¿Qué entendemos por el término “Babilonia” (obviamente es un símbolo, no un lugar literal)? ¿Qué nos enseña esto acerca de nuestra obligación de continuar predicando nuestro mensaje a los demás, independientemente de sus creencias políticas o religiosas?
Radio Adventista
7 comments… add one
  • Gracias poe el mensaje está claro y comprensible.

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  • buenos días, como Iglesia siempre publicamos la Escuela Sabática en pdf, necesitamos de su Publicación para poder compartir tanto en audio como en pdf…
    Dios siga bendiciendo grandemente su trabajo misionero

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  • Gracias por la leccion. Excelente el resumen. Dios los bendiga

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  • Gracias a Dios por estos estudios

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  • Estudiar la Escuela Sabatica

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  • Las profecías de Daniel y el Apocalipsis sobre las bestias entendiéndose como poderes como los sucesivos imperios o poderes políticos dominantes en la tierra es correcto, pero tengo una inquietud sobre el verdadero poder que esta detrás del poder político que es el poder económico de las empresas transnacionales que son los verdaderos dominadores del planeta y la sociedad que con su dinero corrompen a los políticos para gobernar de acuerdo a sus intereses, manejando con ello el poderío militar subordinado al poder político para causar guerras y derrumbar regímenes políticos que no le son amigables. La pregunta para ustedes los teólogos es como encaja en las profecías estos terribles monstruos insaciables que manejan todo como marionetas a traves de la politica, los medios, la educación,cultura y el aparato militar.

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  • Buenos textos para estudiar y meditar.

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