Leccion 11. Compartiendo la historia de Jesús(3T 2020—Haciendo amigos para Dios)
Textos Bíblicos: Efesios 2:1–10, 1 Juan 4:7–11, Marcos 5:1–20, Hebreos 10:19–22, Gálatas 2:20, 1 Corintios 1:30; 1 Juan 5:13.
Citas
• El evangelio es solo una buena noticia si llega a tiempo. Carl F. H. Henry
• Si no hay un amor apasionado por Cristo como centro de todo, apenas haremos un tintineo en nuestro caminar por el mundo, y simplemente haremos ruido al avanzar. William Wilberforce
• Los cristianos necesitan nuevamente ser llenos del Espíritu Santo para amar a quienes no están de acuerdo con ellos. Y la mayor expresión de amor es compartir con ellos lo más preciado que tiene un cristiano, que son las buenas nuevas de la salvación de Jesucristo. Hermano Andrew
• Sea un buen testigo por la forma en que vive. La forma en que vivimos suele ser más convincente que las palabras que decimos. Billy Graham
• ¿Cual es tu historia? Prepárate para compartirla cuando el Señor te de la oportunidad. Billy Graham
• Soy un gran defensor del concepto de que el cristianismo es más un proceso de asimilación que de aprendizaje, y que la participación significativa de una persona en el proceso es fundamental para que pueda experimentar el poder del Evangelio en su vida. Esta participación requiere tiempo y amor perseverante. Gary Rohrmayer
Para debatir
¿Cómo compartimos “la historia de Jesús” sin que la gente lo descarte y diga “ya habíamos oído todo eso”? ¿Cómo hacemos que Jesús sea relevante en un mundo que ha visto tantas imágenes falsas de él? ¿Sentimos la urgencia de compartir a Jesús cada vez que tenemos una oportunidad? ¿De qué manera podemos también tergiversar erróneamente a Jesús, y cómo se puede corregir esto?
Resumen bíblico
En Efesios 2: 1–10 Pablo describe la esencia del plan de Dios para salvarnos. El amor proviene de Dios, y dado que Dios nos ama, debemos amar a los demás (1 Juan 4: 7–11). Marcos 5: 1–20 es la historia de la sanación de un hombre poseído por el demonio. Por medio de la fe nos aferramos a Jesús (Heb. 10: 19–22). “He sido justificado con Cristo, de modo que ya no soy yo quien vive, sino Cristo quien vive en mí. La vida que ahora vivo en este cuerpo, la vivo confiando en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó por mi”. Gálatas 2:20 VBL. “Es por él que ustedes viven en Jesucristo, a quien Dios puso como sabiduría para nosotros. Él nos hace justos y nos hace libres”. 1 Corintios 1:30 VBL. Tenemos vida eterna porque confiamos en Jesús (1 Juan 5:13).
Comentario
A menudo vemos varios tipos de “técnicas evangelísticas” y programas prediseñados como la respuesta a la necesidad de la iglesia de testificar. Sin embargo, Jesús nunca usó una técnica “programada”. En sus conversaciones con los que conoció, siempre los trató como individuos y se ocupó de sus situaciones particulares. Nuestro problema en el mundo de los medios de hoy es que necesitamos “transmitir”, y el mismo término implica amplitud en cuanto al alcance. En otras palabras, no adaptamos nuestro mensaje a las personas y, sin embargo, aún queremos intentar llegar a ellos a través de los medios de comunicación. Aunque seguramente es útil transmitir algunas ideas e información de esta manera, no podemos confiar en ningún método que no siga la forma en que Jesús compartió las buenas nuevas de Dios. ¿Cuáles son las buenas noticias que tenemos para compartir con otros? En palabras de Jesús: “He venido para que tengan vida y para que la tengan en abundancia”. ¿Qué sucedió, entonces, entre esa simple verdad dada por el Fundador de la Iglesia hace un par de milenios, y ahora? ¿Cuándo fue la última vez que realmente ayudé a alguien a tener una vida más abundante en Jesús? Esa es la pregunta que nos incomoda a todos. Porque se mete bajo la piel de nuestra comodidad, invade nuestra zona de confort y nos hace enfrentar la realidad de este mundo y lo que Dios quiere hacer a través de nosotros. Algunas frases como: “Id y haced discípulos en todo el mundo”. “Si me han visto, han visto al Padre.” “He venido a buscar y salvar lo que se había perdido.” “Poned la otra mejilla.” “Dale tu abrigo y tu camisa también.” “Da tu dinero a los pobres.” Estas son invitaciones al servicio en una comunidad de amistad. Porque Jesús ya no nos llama siervos sino amigos. Debemos ser amigos en la difusión de su evangelio de buenas noticias que en inglés se conoce como góspel (God-spel), y tiene su raíz en el antiguo término anglosajón que originalmente significaba la historia de Dios. Sin embargo, muy a menudo la historia trata de nosotros, y no contamos la historia correcta. Es hora de renunciar a nosotros mismos y devolverle a Dios su lugar. Devolvamos lo que más valoramos: toda esa tonta mundanalidad que ha invadido nuestras vidas, y cambiémosla por el tesoro que no se oxida ni se corrompe. Para que todas nuestras técnicas y programas funcionen, necesitamos volver a la verdad acerca de Dios tal como está expresa en Jesús.
Comentarios de Elena de White
Mientras trabajáis por los demás, mientras les contáis la historia de Jesús, os recibirés las palabras. Las palabras son poder. El habla es un talento maravilloso, pero al hablar palabras desalentadoras, con eonojo y desdén en el hogar, el uso de este talento es muy peligroso. Lo que sois en el hogar lo sereis en la iglesia, y lo que sois en la iglesia, es lo que sereis delante de Dios. Dios quiere que hablemos palabras de esperanza a quienes necesitan consuelo y fortaleza. Él desea que salgamos a los campos para que se abran a la verdad en todas partes. {The General ConferenceBulletin, 23 de abril de 1901 par. 44} En toda oportunidad adecuada repítase la historia de Jesús a los niños. En cada sermón, resérveseles un pequeño rincón. El siervo de Cristo puede hacerse amigos permanentes de estos pequeñuelos. No pierda él ninguna oportunidad de ayudarlos a hacerse más entendidos en el conocimiento de las Escrituras. Esto logrará más de lo que nos damos cuenta para cerrar el paso a las tretas de Satanás. Si los niños llegan a familiarizarse temprano con las verdades de la Palabra de Dios, ello erigirá una barrera contra la impiedad, y podrán hacer frente al enemigo con las palabras: “Escrito está” {Conducción del Niño, p. 523} Trácense los planes más prudentes para que la obra tenga buen éxito… La tarea que el Evangelio abarca como obra misionera constituye una obra recta y sólida que brillará cada vez con más intensidad hasta alcanzar el resplandor del mediodía. — Carta 215b, 1899. {El Evangelismo, p. 18} A veces, maneras y propósitos diversos, modos de operación diferentes en conexión con la obra de Dios, están casi a un mismo nivel en la mente; pero es precisamente en este punto donde se necesita el discernimiento más delicado. Y si algo se logra en relación con el propósito fijado, debe hacerse en el momento oportuno. Debiera advertirse la más leve inclinación del peso en la balanza y debiera decidirse el asunto inmediatamente. Las largas demoras cansan a los ángeles. Incluso es más excusable cometer a veces una decisión equivocada que estar continuamente en una posición fluctuante, vacilando, a veces inclinados en una dirección y luego en otra. La vacilación y las dudas a veces causan más perplejidad y desgracia que procederapresuradamente. {Testimonios para la Iglesia, Tomo 3, p. 545}
Preparado y escrito por © Jonathan Gallagher 2020
Traducción: Shelly Barrios De Ávila